jueves, 3 de abril de 2008

Chanel, cocaina y berberechos

Acabo de bajar del trastero de comprobar mi equipo de buceo y todo esta en perfecto estado, listo para ser usado en cualquier momento. No, no es porque estemos pasando aquí unos días de calor o porque el verano esté a la vuelta de la esquina… es porque hoy he leído en la prensa que el temporal que azotó la costa hace unos días, sacó a flote un fardo con 32 kilos de cocaina… No, tampoco es que yo sea un consumidor, pero con lo que ganaría con su venta me jubilaba.
Y si estoy dispuesto a sumergirme en las profundidades, es porque estoy convencido de que aun quedan más paquetes de esos bajo las aguas de nuestras costas, pues tengo muy claro que el fardo no estaba tirado, no señor, ese estaba escondido.
Y estaba justamente allí, donde se crían berberechos, almejas y zamburiñas, aparte de otras sabrosas especies.
Ahora que uno lee esta noticia cae en la cuenta de muchas cosas y por poner un ejemplo, el por que los ojos saltones de los besugos y el por que el marisco esté por las nubes… ¡joder!, y cómo no va a estar…, si yo una vez me metí una raya y subía por las paredes
Por eso que no me es difícil de imaginar lo que puede pasar al marisco si su comida les va aderezada con un poco de perico. Eso explica también el por que las nécoras andan al revés o el por que te sube el ácido úrico después de zamparte un kilo de percebes
Lo chocante del tema es que probablemente sea gente que vive al lado del mar quien ocultó la droga junto a los peces, quién sabe si no son los mismos que después me ven a mi bajar para la playa con el traje de neopreno y me preguntan si tengo licencia, o ya me acusan directamente de que voy a joderle los centollos a las nasas.
Eso si no llaman a la Guardia Civil, en caso de que me vean salir del agua con una solla o un rodaballo… que también manda carallo… como si no hubiese más peces en el mar.
¿Y qué pasaría si lo encuentro yo y me ven los dueños salir con el fardo del agua como quien saca una lata de Coca-Cola, pensando que estoy contribuyendo a mantener limpio el fondo marino?... ¡ja!, me mandarían a un sicario a que me metiese un par de tiros… de tiros pero de los de se dan con pistola, porque no creo que me fuesen a invitar a ninguno.
¿Y si me pillase la Guardia Civil?... me caen 20 años y 1 día sin comerlo ni esnifarlo.
Claro que si me encuentro un paquete en el fondo del mar, no soy tan gilipollas como para pensar que es mierda precintada… anda que no se oyen por aquí historias y leyendas acerca de las “especies” que se dan por las costas gallegas.
No, yo no soy tan tonto como el angoleño aquel que le preguntaba mi amigo el marinero, donde coño pescaban las sardinas enlatadas.
Que tiempos aquellos en los que fácilmente te podías encontrar un televisor en color o un par de cartones de Winston americano, dando un paseo por la playa.
En fin, no quisiera acabar esta entrada sin advertir a mi amigo Ramón, que suele bucear por esa zona, que se ande al loro con lo que se encuentre en el fondo del mar.
Ramón… ¿estás ahí?... escucha… digo lee lo que te digo: si encuentras un paquete en el fondo del mar déjalo estar… que te pueden estar esperando fuera.
¿Qué te parece si un día vamos a bucear a Rande?... dicen que allí hay un tesoro en un galeón hundido… Con uno de esos también nos jubilábamos

4 han comentado:

pinchinho dijo...

Y digo yo...

Ya que a ti no te hace falta, como dices, me puedes dejar tu equipo de búceo?

Yo si que iría, y aun que me esperen fuera..., me meto una raya y cruzo el Atlántico....

m4n010 dijo...

jajajajaja... una raya?... el mar está lleno de rayas y en caldeirada están de puta madre.

Serendipya dijo...

VAya Manolo... qué bien te sienta el traje de neopreno :P jeje

No busques tesoros en el mar... suelen estar en tierra MAnolo...


Besos¡¡

m4n010 dijo...

tipo guapo eh... bueno, la foto ya tiene sus 5 añitos, aunque el traje me sigue quedando igual, lo que ya no me queda igual es el flequillo.

Tesoros en tierra?, dónde... dónde