jueves, 20 de noviembre de 2008

Viernes a partir de las 12, ya es sábado

¡Uaaahhh!, que picor me está dando en la planta de los pies y en este preciso momento en que no me los puedo rascar por tener las manos ocupadas en el teclado.
Mira que me jode, pero al final voy a tener que darle la razón a las mujeres cuando dicen que los hombres no somos capaces de hacer dos cosas a la vez.
¡Uaaahhh!, no aguanto, un momento por favor…
(…/…)... Ufff, que alivio.
Pues eso, me jode tener que dársela, pero cuando la tienen, la tienen, y cuando no , se le da y punto, a fin de cuentas tampoco cuesta tantoSííí, mejor te irá si no eres tan chulito y se la das.
A lo largo y ancho de los veindieciummm. A lo largo y ancho del montón de años que llevo de carrera matrimonial sobre mis espaldas y los cuatro puntos cardinales de mi cuerpo: cabeza, pies, extremidades laterales y… y… anda coño, ahora no recuerdo el cuarto punto… es igual, lo que quería decir es que en todo este tiempo he aprendido dos cosas importantísimas que todo hombre que se precie debe también saber, una es a freír un par de huevos y otra a darle la razón a la parienta aunque no la tenga.
Debo decir que los huevos al freírlos se me deforman todos, no tienen la característica forma de lo amarillo en el medio con lo blanco a su alrededor.
No, los míos tienen una forma muy distinta, algo así como entre esperrechados y abstractos. Lo mismo me salen con lo blanco alrededor de lo amarillo, como me sale lo amarillo en una esquina o debajo de lo blanco. En cualquier caso me salen y son comestibles... siempre y cuando no haga otra cosa al mismo tiempo, jeje.
Sin embargo lo de darle la razón a la mujer me sale bordado. La experiencia es la madre de la ciencia como se suele decir, y yo soy todo un experto. Como no voy a serlo si me paso todo el día entrenando para ello "sí cariño, lo que tú digas mi amor, tienes razón corazón, bueno pues si hoy no te apetece lo dejamos para el sábado"
Y así día tras día, pero es mejor sabes, dándole la razón te evitas muchas discusiones tontas. Fastidia un poco porque parece que el sábado no da llegado, pero al menos te pasas la semana tranquilamente, y al final, del mismo modo y con la misma exactitud que sale el sol cuando se marcha la luna, el sábado llega como siempre el viernes a las 12 de la noche. Y si no me lo crees, esta noche no te acuestes tan temprano y compruebalo por ti mismo.
Ahora bien, si tu mujer te dice de ir pronto para cama ni se te ocurra llevarle la contraria, eso sí, al loro si una vez acostados te dice de dejarlo para el sábado, que una cosa es darles siempre la razón y otra muy distinta pecar de gilipollas, en ese caso tú insiste, insiste e insiste, porque los sábados empiezan siempre los viernes a las 12, ¡y así todos! y hoy no es una excepción.
Y si no te cree le dices que te lo he dicho yo y que tengo un calendario actualizado.
Corto y cierro ya porque vuelvo a sentir picor en las plantas de los pies.


¡ESPALDA, coño!..., sííí, era la espalda el cuarto punto cardinal y que no recordaba.
¡Jo!, que bien pienso en cuanto dejo de escribir.

3 han comentado:

Carmen dijo...

Pues yo tengo entendido que si te pica la planta del pie es porque vas a viajar...

Prepara las maletas, por si acaso.

Besos y buen finde

Jose Antonio dijo...

No hay nada más eficaz como dar la razón a la contraria, en esos momentos parece que estámos en el mismo equipo,ja,ja,ja.

Saludos y seguiré tus recomendaciones, aunque la lección de los huevos ya la leí antes y no me estraña nada que te salgan así.

saludos Cordiales.

Aspective dijo...

Darle la razón, y sacar el lavavajillas, bajar la basura, tender la ropa, recoger la mesa, hacer la comida (eso no me importa, guiso de muerte)y darle la razón.
feliz vida de casado.
y además aquello de f@//@$ menos que un casado.
en fin, en la próxima vida me pido perro, o pulga, o algo igual de importante que no se case. Y menos dos veces.