sábado, 29 de noviembre de 2008

Revisa tu vista

Revisa tu vista para saber bien lo que comes.
Es un consejo del Colegio Oficial de Oculistas y Gafólogos.


La primera vez de Antonio Alcántara

Cuando en el capítulo del pasado jueves, Antonio Alcántara Barbadillo, regaló el encendedor al desconocido pasajero que viajaba con él en el avión, supe que después de no sé cuantos años de fidelidad matrimonial y 157 capítulos a sus espaldas, le había puesto por primera vez los cuernos a su esposa Mercedes Fernández, y mira tú por donde que fue a hacerlo en Bilbao precisamente.
No es que Bilbao tenga algo especial para esas cosas, pero me gusta destacar este dato por si quiere tenerlo en cuenta algún amante de las estadísticas.
A mi no me gusta nada meter las narices en la vida de los demás, ni tampoco en la de las parejas, pero en este caso sí voy a decir que aunque su señora no se merecía el adorno, Antoñito, se ha lucido.
Porque estuvo genial para no ser más que un simple ex funcionario recién metido a empresario. Que arte en el tema de la conquista, toda una clase maestra para ser su primera vez.
Así como quien no quiere la cosa el tipo le soltó el rollo de la máquina impresora, aunque cierto es que la mujer ya estaba tocada con la explicación de cómo planea un avión aunque se le apague el motor.
Sorprenderlo mirando una joya para su esposa fue otro puntazo, porque eso a las mujeres es algo que les gusta mucho. Ya se lo dijo bien clarito ella: “ojalá mi marido se parase a ver un escaparate para mirar algo que regalarme”.
Sí, ya sé que eso lo dicen todas igual que nosotros decimos lo de que “ojalá mi señora esperase mi llegada a casa en bragas”, pero yo en esas palabras adiviné las intenciones de la mujer y así se lo dije a la mía: “esa quiere tema”, y a continuación y aprovechando que el tema daba pie le dije también que ya le había estado mirando su regalo de Navidad… para que no ande diciendo esas cosas por ahí.
Y luego para rematarla pide, Champán francés y caviar. Eso es clase amigo. Toma nota, así no se falla, así se folla…
Claro que en un buen hotel con un poco de conversación, Champán francés y caviar, seducir a una mujer es algo que cualquiera puede lograr, pero beneficiársela a ella y conseguir como extra que además le regalase el mechero, es para quitarse el sombrero.
Pues sí, el capítulo de Cuéntame como pasó, del pasado jueves me abrió un gran dilema, ya que si por un lado la infidelidad de Antonio me defraudó, la forma en la que la llevó a cabo causó mi admiración.
Por otra parte está la movida de su mujer Mercedes y su amigo homosexual. Conste que yo también lo veía venir y también se lo dije a mi mujer: “el mariquita este quiere cepillarse a Mercedes”…
¡Y como se me rebotó!. Que si sólo son buenos amigos, que si tú siempre pensando en lo mismo, que si eres un desconfiado, que si patatín, que si patatán
Sí, sí… pero al final era como yo decía. Si es que todo está inventado ya.
Supongo que después de todo mi mujer se quedaría convencida de que tengo más que intuición para ciertas cosas, intuición que he ido desarrollando con el paso de los años y gracias en su mayor parte a cosas que he visto por ahí y de las que he ido aprendiendo.
Este jueves por ejemplo, de este capítulo he aprendido algo muy importante, que no te puedes fiar de los mariquitas.
De los viajes de negocios tampoco te puedes fiar, pero bueno, eso ya lo sabíamos, ¿o no?.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

El marido siempre llama dos veces

Ayer me comentaba un compañero de trabajo que días atrás un amigo suyo llego a casa y se encontró a la mujer metida en cama con otro. Eso tiene que joder mucho, me dijo muy compungido.
-eso es algo que a mí nunca me pasará-, le dije muy serio.
-eso te puede pasar a ti y a cualquiera-.
-a cualquiera sí, pero no a mi- insistí muy convencido de lo que decía.
-¿qué haces tú entonces para estar tan seguro, le pones un cinturón de castidad a la mujer o la atas a la pata de la cama?- me preguntó con cierto recochineo.
-ni lo uno ni lo otro, yo para evitarme ese tipo de sorpresas siempre toco un par de veces el timbre en vez de abrir la puerta-.
Yo creo que avisando de mi llegada les doy tiempo para que dejen de hacer lo que puedan estar haciendo y al mismo tiempo pondría en un entredicho a mi mujer, pues si quisiese que siguiese confiando en ella no le quedaría más remedio que tirar al otro por la ventana.
Pero supongo que sí tiene que doler mucho descubrir a tú pareja en una infidelidad, y en varias ya no te digo. O que te pase lo que le pasa a muchos que al cabo de los años descubren que esos niños que llevan su apellido no son sus hijos.
¡Uff!, lo que tiene que joder eso. Sobre todo enterarse muy tarde, porque yo pienso que de no ser de uno lo mejor es saberlo desde el primer momento, lo puedes aceptar y quererlo como si fuese tuyo, pero hostias, eso de enterarte de que es del carnicero cuando ya le tienes pagada la carrera y comprado un coche, manda huevos.
Al final esto no debe de influir en nada, pues si lo has criado y educado como si fuese tuyo, tuyo será aunque la gota la haya puesto otro, pero manda huevos otra vez, que el tipo bien que te cobraba las chuletas con las que alimentabas a su, tú… al hijo que tenéis a medias.
San José por ejemplo, lo supo desde el primer día y mira que bien lo llevó, hasta el título de santo le dieron por ello. Pero tampoco te creas que es así con todo el mundo, estoy seguro que me pasa a mí y me dan el título de cornudo.
Por la otra parte, no hace mucho que leyera en la prensa la noticia de un hombre que por motivos de salud necesitó que sus hijos le donasen no recuerdo el qué, y las pruebas pertinentes antes de llevarlo a cabo dieron como resultado que de los seis hijos que tenía, cinco no eran suyos.
5 de 6 en una primitiva es un pellizquito, pero en el caso de este pobre hombre era una cornamenta digna del libro de los records.
En mi caso no me cabe ninguna duda de que mis dos hijos son míos ya que ambos tienen rasgos muy claros de ello, el varón es clavadito a mi tanto físicamente como en la forma de ser, y la niña se muerde las uñas igual que yo.
Me viene ahora a la memoria el caso de un hombre que en 20 años de casado jamás le había hecho el amor a su mujer con la luz encendida, cosa de lo que ella estaba ya un poco aburrida, por lo que una noche en pleno acto y sin avisar encendió la luz y sorprendió a su marido "haciéndoselo" con un consolador.
Ni que decir tiene que el enfado de la mujer fue de órdago y entre gritos e insultos le reprochó a su marido tantos años de engaño exigiéndole una explicación al respecto.
-Calma cariño, yo te lo explico todo, pero antes explícame tú a mí cómo coño tuve tres hijos-.
Pero lo que quiero decir con esta entrada, es que por un momento me he puesto en el pellejo del amigo de mi compañero y me he preguntado cómo reaccionaría yo de encontrarme en tal situación, llegando a la conclusión de que lo mejor es que siga llamando al timbre como hasta ahora.

martes, 25 de noviembre de 2008

Cazado

De un tiempo a esta parte, este país llamado aquí viene padeciendo una oleada de asaltos a domicilios particulares que de no ser porque vivo en un tercero estaría acojonado.
Casi todos son cometidos por bandas procedentes de los países del este, que son los que en el mapa de Europa están situados a la derecha. Están preparados, armados y son más peligrosos que bailar un tango con Espinete.
Pero no son estes del este las únicas bandas que operan por aquí, también las hay nacionales y yo ayer fui una de tantas y tantas víctimas de una de ellas.
Ayer domingo y a la hora que los buenos van a misa me entraron ganas de ir a la piscina nadar, así que me levanté de cama y me eché a la carretera. Circulaba por la Carretera Nacional 550, con dirección a Compostela y por una larrrga recta en la que no había ningún tráfico.
De pronto y de entre dos contenedores de basura sale un hombre vestido con una cazadora verde, se pone en medio de la carretera y me hace indicaciones para que me detenga.
Dirás tú ahora, joer que memoria tiene el Manolo que se acuerda incluso de cómo iba vestido. Pues sí, iba totalmente de verde y en un bolsillo de la cazadora llevaba una chapita que ponía GUARDIA CIVIL. Ya ves, tengo muy buena memoria y además soy muy observador.
Y tampoco me olvidaré de su cara, como hacerlo si me jodió 380 euros, 6 puntos y 1 mes sin carnet de conducir. Eso sí, con mucha educación y sin violencia, aunque para mí fue violentísimo, y decírselo a la mujer ni te cuento.
Al parecer me pilló un radar a 100 km/h donde está limitado a 60. Un límite que precede a otro que 150 metros más adelante marca 50 y que ese sí pasé a la velocidad permitida, porque paso cuatro veces al día por ese tramo y sé que todos los días se ponen ahí de cacería.
Me pillaron frenando y por unos pocos metros, pero me pillaron.
Y cuando me marcho el agente me dice que tenga un buen día. ¡Un buen día, desgraciado!, pero si me acabas de joder el día, el mes, el mes que viene y el siguiente. ¡Y en plena crisis y con las navidades a las puertas!, ¿y ahora qué? ¿qué le regalo yo a la mujer?, ¿enmarco la foto del radar y hago con ella un cuadro para la sala?.
¿Qué dirán los del G-20 de esto?, ¿y Obama?... ¡Diossss!, por qué cojones ayer no me quedaría en cama…
En el punto azul estaba el radar y en el rojo me pararon. Ya sé que no os importa, pero una foto adorna mucho la entrada.

sábado, 22 de noviembre de 2008

Competencia desleal.

Menuda discusión tuve ayer con la mujer por culpa del Barceló y su cúpula de marras. Sólo a ella se le ocurre poner en duda mis conocimientos y mi experiencia laboral cuando sabe que llevo cerca de 35 años trabajando en el gremio de la pintura.
Me importa un bledo que el tipo sea un artista reconocido, pero si yo digo que últimamente se lleva la pintura lisa en tonos ocres y amarillos, ella no es quien para discutirme tal cosa por mucho que el fulano haya pintado el techo a colorines y en picado.
-En tu empresa no sois capaces de pintar así un techo- me dice toda convencida.
-pues claro que no, en mi empresa somos profesionales y nunca entregaríamos un trabajo al que como este se le aprecia la falta de masillado y al que le falta la segunda mano-, si lo sabré yo.
Vamos, que le dejamos un techo con ese acabado a cualquier aparejador y nos mete en la cárcel.
Y ya no te digo el cliente. ¿O qué piensas tú que diría el presidente Touriño si le hubiésemos dejado así el techo de su despacho?.
Cada uno tiene que dedicarse a lo suyo, y este señor Barceló, con todos mis respetos, que se deje de hacernos la competencia y no vuelva a pintar más techos, del mismo modo en que nosotros nos comprometemos a no pintar lienzos.
Joder, es que vaya “ñapa” que nos ha birlado este espabilado. Ese trabajo lo hubiésemos hecho nosotros por la mitad de la cuarta parte de lo que el se ha embolsado, mucho más rápido además y con un acabado más profesional, porque nosotros al menos lo hubiésemos masillado y dado una segunda mano.
Y hubiesemos salido ganando todos y yo ahora estaría en el Caribe de vacaciones pagadas por el proveedor de la pintura. Sííí, no me lo discutas a mí que soy un profesional y sé de muy buena tinta que si a cualquier comercial le compro de una tacada 35.000 kilos de pintura, con ésta me regala un viaje de 15 días a gastos pagados a donde yo quiera ir.
Y con la pintura que me sobra aún pinto un polígono de viviendas… ¡y con dos manos de acabado!.
Eso sí, a nosotros nos pilla un Inspector de Trabajo pintando el techo de un cuarto de baño en las mismas condiciones en las que se pintó ese y nos meten un puro que nos dejan temblando.
Porque yo le he visto por la tele y ese hombre estaba sobre una especie de andamio, sin la mascarilla y el arnés de seguridad obligatorio, (falta grave y sancionable). Vamos, que estaba allí arriba como si fuese un chapuzas cualquiera.
Pero lo que más me fastidia es esto de tener que discutir con alguien que no sabe de que va esto. Y que te digan aun por encima que eso representa a un mar embravecido.
¿Mar embravecido?… ¡anda, no me jodas!, vamos hasta Finisterre que allí hoy debe estar medio bravo y a ver dónde carallo le ves los colorines.
Que yo he visto el mar bravo muchas veces y cuando está así es únicamente gris. Y además un gris oscuro que mete miedo.
Y ese picadito ni de coña representa la bravura del mar. A mi entender y por encontrarle parecido alguno con el mar, diría que más bien parecen las aguas de la Ría de Muros cuando sopla viento del nordeste.
Así que lo dicho, yo de arte no tengo ni idea, pero sí de pintura, y si digo que el techo está mal pintado, es que está mal pintado, y lo que ese hombre ha hecho no es arte, si no que es COMPETENCIA DESLEAL.

jueves, 20 de noviembre de 2008

Viernes a partir de las 12, ya es sábado

¡Uaaahhh!, que picor me está dando en la planta de los pies y en este preciso momento en que no me los puedo rascar por tener las manos ocupadas en el teclado.
Mira que me jode, pero al final voy a tener que darle la razón a las mujeres cuando dicen que los hombres no somos capaces de hacer dos cosas a la vez.
¡Uaaahhh!, no aguanto, un momento por favor…
(…/…)... Ufff, que alivio.
Pues eso, me jode tener que dársela, pero cuando la tienen, la tienen, y cuando no , se le da y punto, a fin de cuentas tampoco cuesta tantoSííí, mejor te irá si no eres tan chulito y se la das.
A lo largo y ancho de los veindieciummm. A lo largo y ancho del montón de años que llevo de carrera matrimonial sobre mis espaldas y los cuatro puntos cardinales de mi cuerpo: cabeza, pies, extremidades laterales y… y… anda coño, ahora no recuerdo el cuarto punto… es igual, lo que quería decir es que en todo este tiempo he aprendido dos cosas importantísimas que todo hombre que se precie debe también saber, una es a freír un par de huevos y otra a darle la razón a la parienta aunque no la tenga.
Debo decir que los huevos al freírlos se me deforman todos, no tienen la característica forma de lo amarillo en el medio con lo blanco a su alrededor.
No, los míos tienen una forma muy distinta, algo así como entre esperrechados y abstractos. Lo mismo me salen con lo blanco alrededor de lo amarillo, como me sale lo amarillo en una esquina o debajo de lo blanco. En cualquier caso me salen y son comestibles... siempre y cuando no haga otra cosa al mismo tiempo, jeje.
Sin embargo lo de darle la razón a la mujer me sale bordado. La experiencia es la madre de la ciencia como se suele decir, y yo soy todo un experto. Como no voy a serlo si me paso todo el día entrenando para ello "sí cariño, lo que tú digas mi amor, tienes razón corazón, bueno pues si hoy no te apetece lo dejamos para el sábado"
Y así día tras día, pero es mejor sabes, dándole la razón te evitas muchas discusiones tontas. Fastidia un poco porque parece que el sábado no da llegado, pero al menos te pasas la semana tranquilamente, y al final, del mismo modo y con la misma exactitud que sale el sol cuando se marcha la luna, el sábado llega como siempre el viernes a las 12 de la noche. Y si no me lo crees, esta noche no te acuestes tan temprano y compruebalo por ti mismo.
Ahora bien, si tu mujer te dice de ir pronto para cama ni se te ocurra llevarle la contraria, eso sí, al loro si una vez acostados te dice de dejarlo para el sábado, que una cosa es darles siempre la razón y otra muy distinta pecar de gilipollas, en ese caso tú insiste, insiste e insiste, porque los sábados empiezan siempre los viernes a las 12, ¡y así todos! y hoy no es una excepción.
Y si no te cree le dices que te lo he dicho yo y que tengo un calendario actualizado.
Corto y cierro ya porque vuelvo a sentir picor en las plantas de los pies.


¡ESPALDA, coño!..., sííí, era la espalda el cuarto punto cardinal y que no recordaba.
¡Jo!, que bien pienso en cuanto dejo de escribir.

Que lista eres mamá.

Recuerdo que cada vez que me quejaba a mi madre de que me dolía la cabeza, ella siempre me contestaba que ese era un síntoma de riqueza. Bien, pues haciendo caso a estos síntomas, este fin de semana acierto la porra o acierto un pleno en la quiniela, por que me está doliendo un montón.
Si eso me lo hubiese dicho el médico del seguro ya lo estaría poniendo a caer de un burro, pero como lo ha dicho mi madre me voy a callar y no lo voy a discutir, y en cuanto salga de aquí me voy corriendo a sellar la quiniela.
Eso sí, de no acertar nada el lunes me voy urgentemente al médico porque entonces ya sería grave la cosa, al menos así lo dice la guía médica en fascículos coleccionables que compré hace unos años en un kiosko: El médico en casa. En el primer párrafo ya lo dice muy claro y en un perfecto castellano: “el dolor de cabeza puede ser síntoma de muchas enfermedades…”
También que mala suerte la mía coño, que en lugar de tenerlas de una en una como todo el mundo, me toque de tener muchas enfermedades a la vez.
Apuesto que me mandará hacer análisis de sangre, placas, escaner, etc. etc, para saber con cual de ellas me quedo, o para lo que también suelen hacer, ir descartando las que no tengo.
Por ello y para evitar pruebas innecesarias y al mismo tiempo ahorrarle gastos a la Seguridad Social, cada vez que entro en la consulta del doctor y para ir descartando ya algunas, yo mismo lo aviso de todo aquello que creo no me provoca el malestar, por eso que si el lunes voy a que me examine, de entrada tendré que decirle que me duele la cabeza y al mismo tiempo advertirle de que no creo que sea a consecuencia del callo que tengo en un pie, ni tampoco de la próstata.
Todo ello como he dicho, con el fin de ahorrar gastos al seguro y al mismo tiempo evitar que el médico me meta un dedo por el culo.
De todos modos no creo que sea muy grave la cosa, porque aunque es cierto de que me duele bastante mantengo aún las constantes vitales, al menos hace un rato las he comprobado en el retrete del trabajo y el corazón seguía latiendo con su característico ritmo de primero un “boom” y después otro.
También conservo las pupilas en los ojos y he comprobado que éstas funcionan perfectamente ya que he podido verlas, y también y al igual que el resto de los mortales sigo teniendo el pulso en la muñeca.
Donde sí he encontrado un pequeño problema ha sido al comprobar la respiración, ya que al inspirar por la nariz he tenido arcadas y casi me sale el vómito. Tampoco creo que sea nada importante ya que lo he vuelto a comprobar fuera del retrete y ahí ya no he tenido esos síntomas, es más, ahí he comprobado que podía oler perfectamente.
¡Anda coño!... si ya me está pasando el dolor… lo que yo decía, muy grave no podía ser cuando yo mismo me curé con una aspirina.
Pues mira tú que bien, con una pastillita asunto arreglado y todos contentos. La Seguridad Social menos pobre gracias a lo que yo le ahorro, el médico menos agobiado por tener un paciente menos que atender, yo sano sanote y hecho un machote, y mi madre, mi madre es una santa que cuando habla siempre tiene razón.
Y ya lo decía ella: "si te duele la cabeza es síntoma de riqueza…" y a mi ya no me duele, pero estamos a día 20 y tampoco tengo una puta perra.
Que putada que nunca se equivoque.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Reales opiniones

El Rey también cayó en el despiste de hablar a micrófono cerrado y dio su real opinión acerca de la cúpula que Barceló pintó en la sede de la ONU.

Una entrada cojonuda

Veo que mi entrada anterior ha sembrado las dudas de alguna lectora en algún punto concreto de la misma, de la misma entrada quiero decir, no de la lectora. Esta duda es generada por un accidente de trabajo padecido en repetidas ocasiones por este que os escribe, siendo tal accidente el “aplastamiento de un testículo al sentarse sobre el mismo o al cruzar las piernas en posición de sentado, (unas cincuenta veces entre los dos testículos)”.
Bien, creo que ante la duda lo menos que debo hacer es dar una explicación de porqué se produce tan doloroso fenómeno y al mismo tiempo felicitarme a mi mismo por haber logrado que aunque sólo fuese por un instante, la mente de esas lectoras se haya parado a pensar en mi entrepierna… jejeje, perdón por el chiste fácil, pero hoy tengo el día gracioso.
Según el diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, aplastamiento significa: disminución del grosor de algo tras haberlo presionado o golpeado hasta deformarlo.
De esta definición se puede decir que un aplastamiento testicular viene a ser más o menos lo mismo pero con un huevo por el medio y nunca mejor dicho, con la salvedad de que por estar el susodicho testículo hecho de un material maleable, no disminuye en su tamaño si no que cambia de forma, lo cual quiere decir que su característica forma esférica se transforma en otra cualquiera, pudiendo ser cilíndrica, tetraédrica y aunque ésta es más difícil por tener esquinas, también cúbica.
En todo caso adquiere una forma defórmica y dolorosa, pero no es la forma lo que duele si no que duelen los huevos.
Como decía una canción popular de los años sesenta:
“El dolor de los dolores
el dolor más inhumano
es pillarse los cojones
con la tapa de un piano”.
Debo decir que yo no toco el piano ni con los huevos ni con las manos, por eso nunca me los he pillado con la tapa, así como que hasta ahora tampoco me los he pillado con cualquier otro instrumento musical, pese a que a veces toco la pandereta y la armónica, pero me imagino que eso tiene que ser dolorosísimo.
El accidente al que yo hago mención, es decir, el aplastamiento testicular, se produce al realizar la acción de sentarse o al estando sentado cruzar las piernas, y viene dado a que el testículo en cuestión no se desplaza lo suficiente de la zona de acción, quedando expuesto a que uno se siente sobre él, o bien que al cruzar una pierna sobre la otra apoye ésta bien sobre el susodicho cojón o bien sobre el otro, el cual y por la descrita definición de aplastamiento, se deforma de tal forma que puede producir presión en las amígdalas, o cocochas como dicen en Pamplona.
No señoras y señoritas, los hombres no exageramos nada cuando decimos aquello de que se nos suben los cojones a la garganta, porque es cierto.
Sé como son por fuera, aunque desconozco el tamaño interior de dichos elementos corporales masculinos, pero supongo que deben tener un entramado de raíces tan extenso y complejo capaz de abarcar desde la laringe hasta los mismísimos huevos.
Por eso que cada vez que me los pillo y los aplasto, instintivamente cierro la boca y llevo las manos al cuello.
Con la boca cerrada evito que se me salgan y con las manos los devuelvo a su sitio...
Déjate de coñas que en una ocasión vi como una vecina perdía la dentadura postiza en un ataque de risa y tuvo que comprar otra que le costó un dineral. Imagínate perder de la misma manera los huevos…

martes, 18 de noviembre de 2008

Me voy de cursillo

Hoy me han comunicado en el trabajo que dentro de unos días debo asistir a un cursillo de prevención de riesgos laborales, lo cual me parece magnífico, sobre todo desde que hará cosa de un mes estuve a punto de sufrir un accidente laboral, uno de esos llamados in itínere, puesto que casi me atropella un coche en el itinerario entre la oficina y el bar, cuando me iba a tomar un café.
Como se suele decir: "si Mahoma no va a la montaña, va la montaña a Mahoma", y puesto que no me traen el café a la oficina tendré que seguir yendo al bar a tomarlo, lo que por consiguiente me hace pertenecer a uno de los denominados factores de riesgo.
Al contrario de lo que puedas pensar el personal de oficina también es susceptible de sufrir accidentes de trabajo, y para muestra de lo que digo aquí dejo una pequeña relación de varios los que yo he padecido, alguno de ellos en repetidas ocasiones:
  • Golpearse las rodillas contra los cajones de la mesa, (más de cien veces)
  • Golpearse la cabeza contra la esquina de la mesa al agacharse para recoger el bolígrafo, (dos veces).
  • Graparse un dedo a un balance de situación, (una vez).
  • Graparse un dedo al extracto de una cuenta, (una vez).
  • Graparse un dedo jugando con la grapadora, (dos veces).
  • Aplastamiento de un testículo al sentarse sobre el mismo o al cruzar las piernas en posición de sentado, (unas cincuenta veces entre los dos testículos).
  • Caída de la silla por desplazamiento horizontal de ésta, (dos veces).
  • Cortarse un dedo afilando un lápiz, (una vez).
  • Tragarse un clip, (una vez).
  • Confundir por teléfono al jefe con un compañero y mandarlo a tomar por culo, (una vez, pero no fue).
  • Susto morrocotudo por imprevista y silenciosa llegada del jefe, (dos veces… al día).
Estos me han ocurrido dentro de la oficina, fuera de ella y en horario laboral (por lo tanto accidentes de trabajo) también he padecido los siguientes:
  • Resbalón y caída por una escalera, (una vez).
  • Atragantamiento con churro, (una vez).
  • Quemaduras en la lengua por estar demasiado caliente el café, (tres veces).
Como habéis comprobado, el personal de oficina también se la tiene que jugar a diario para ganarse la vida, motivo por el que considero de vital importancia mi asistencia a estos cursillos, aunque la verdad, en mi caso creo más importante el que pinten un paso de peatones en la puerta del taller para poder ir a tomar el café con total tranquilidad, sobre todo desde que la estanquera de aquí al lado se ha comprado un coche.
Os mantendré informados de todo lo que aprenda en este cursillo, a fin de cuentas éste es el objetivo de los mismos, que todos sepamos donde puede ocurrir un accidente y así poder prevenirlo... porque ponerse un condón, no te protege de todo.
Por lo de pronto toma nota de mi primera advertencia: cuidadito con las grapadoras que las carga del diablo.


lunes, 17 de noviembre de 2008

Culos fríos, huevos calientes

Si hay algo que me gusta hacer nada más levantarme, es sin lugar a dudas volver a acostarme, y esta mañana pude realizarlo ya que me he despertado a las 7:15, he orinado y he vuelto a la cama para aprovechar los 45 minutos que me faltaban antes de que mis tres despertadores sonasen a la vez.
Estos minutos que espero en cama que llegue la hora de levantarme me los pasó meditando y es cuando mejores ideas tengo, pues me encanta pensar con la cabeza fría y los pies calientes.
El único inconveniente que tengo es la erección de todos los días a esa hora ya que me es muy difícil pensar si estoy excitado, lo bueno es que a esas horas la erección se desvanece con la meada.
Son mis mejores momentos de lucidez y durante los cuales suelo dar en el clavo en todo lo que pienso, sirva como ejemplo de lo que digo que hoy bajo las sábanas y al calorcito, miré hacia la ventana pensé: “debe hacer un frío de cojones”. Y vaya si acerté, pues hacía un frío de cojones.
Quizá deba puntualizar que los cojones son precisamente la parte de mi cuerpo que mejor conserva la calor, motivo por el cual muchas veces los utilizo como calentador de manos.
Todo lo contrario que los pies, que aparte de ser la zona más fría de mi cuerpo, cuentan con el inconveniente de que por su ubicación y su poca elasticidad, no los puedo acercar hasta la parte más caliente para darles el calor que necesitan.
No sé si tú que me lees coincides conmigo en cuanto a los puntos fríos y calientes del cuerpo, pero casi me atrevería a decir que sí, igual que me atrevería a decir que si eres mujer, aparte de los pies, también tendrás fríos el culo y la punta de la nariz.
No voy a decir encima de cuantos culos femeninos posé mis manos, pero sí diré que en todos cuantos lo hice me los encontré fríos. Esta observación no sólo la he averiguado por mi mismo tras muchos culos de estudio, si no que tal afirmación me ha sido desvelada por una mujer que presumía de conocer bien el suyo.
Ahora unas dirán que sí y otras dirán que eso no es cierto, y algunas habrá también que se lleven la mano al trasero para ver a que temperatura lo tienen. Qué, ¿tengo o no tengo razón?...
Aunque he observado y estudiado bastante el culo femenino, jamás lo he hecho acerca de su temperatura, pero muchas veces me he preguntado a qué puede ser debido el que siempre esté frío, inclinándome a pensar que es cosa de la naturaleza que del mismo modo que quiso que la gallina tuviese el culo caliente para poder incubar huevos, quiso que la mujer no tuviese huevos y por lo tanto la hizo con el culo frío.
Es probable que no te creas nada de esto que acabo de escribir pero puedes comprobarlo si quieres, para ello no tienes más que tocar el culo de tu novia o el de tú mujer y verás como lo tiene frío.
Ah, que tú no tienes ni novia ni mujer, bueno, pues entonces métete la mano en los huevos y verás como los tienes calientes.
¿Qué?... ¿es cierto, verdad?... Si ya te lo había dicho yo.
Ten presente que soy contable y sé lo que me cuento.

sábado, 15 de noviembre de 2008

La otra "última cena"


La cena que esta pasada noche celebraron en la Casa Blanca los representantes de los gobiernos de los países pertenecientes al G-20, pasará a ser la cena más importante de la historia de la humanidad junto con la famosa última cena de Jesucristo.
Ambas cenas tienen en común que fueron las últimas cenas de quienes invitaron, la de Cristo y la de Bush, y que Dios me perdone por la comparación, pero quien le diera al tejano la melena del judio.
También en ambas había un traidor, en una fue Judas, y en esta es Zapatero… Y no te vayas a pensar que lo digo por meterme con él, pero es cierto.
Ahora estaba mirando la foto de la cena y pienso en lo aburrida que tiene que ser y que yo no iría ni aunque pusiesen percebes de entrantes.
Porque me pregunto yo, ¿de qué coño hablaran si entre ellos no se entienden?. Seguro que la mayoría de ellos en inglés, pero nuestro presidente no tiene ni idea y no creo que en dos tardes fuese capaz de aprender lo suficiente.
Me lo imagino al pobre entre el checo y la alemana sonriendo y diciendo que sí a todo con movimientos de la cabeza.
Yo me veo en tal situación y bebo, sí, sí, bebo y hago beber al resto. Lleno la copa de vino, me levanto y propongo un brindis como despedida al anfitrión. No está en el protocolo pero a ver quién se me iba a negar.
Más tarde otro brindis por la paz en el mundo. ¿Qué?, por algo como la paz y aunque sólo fuese por quedar bien tampoco se me iban a negar.
Y luego un tercer brindis por la Alianza de Civilizaciones, que como hay un árabe entre los asistentes seguro que es el segundo en alzar su copa, y a ver cual de los otros tiene huevos a negárselo.
A estas alturas de la cena la peña ya se soltaría un poco más, la argentina seguramente estaría habladora y los ojos de la alemana resplandecerían como farolas.
Pido un cuarto brindis por el capitalismo y un poco más tarde un quinto por Alemania, que la canciller me tendría que responder por cortesía con otro por España.
Y una vez entrado en esa dinámica ya la tenía montada, porque a continuación pido un brindis por cada uno de los países participantes y antes de acabar con todos ellos ya tenemos la mierda encima.
Después aún vendría el wishy de Bush, del que se sabe le gustaba empinar, y una vez acabado éste propongo tomar la última en una barra americana. ¡Hombreeee!... estamos en América, que menos que acabar en un puticlub. Y además que pague el americano.
Eso sí, la reunión tendría que posponerse para otro día, ya que al siguiente de la cena estaríamos muy perjudicados. Pero reuniéndonos al tercero seguramente habría más confianza entre nosotros.
Borracho se hacen muy buenos amigos y si al día siguiente no te olvidas de ellos pueden ser incluso duraderos.

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Café, churros y finanzas (II) refundando el capitalismo

Hora: 16:30. Lugar: el bar de enfrente. Asunto: refundar el capitalismo.
Participantes:
  • Pedro "el peluquero", especialista en tomaduras de pelo.
  • Ramón "el camarero", principal causante de la crisis.
  • la Sra. Remedios, empleada de la limpieza en Caja de Ahorros y en representación del sector financiero.
  • Chian Chin Gao, chino propietario de un todo a 1 euro, en representación de los empresarios del comercio.
  • Ramiro "el electricista", en representación del sector energético.
  • el Sr. Pepe, "albañil en paro", en representación del sector del ladrillo.
  • Manolo, "un servidor", en representación de su bolsillo.
Consumiciones consumidas: seis cafés con leche y un cortado, (el camarero no consumió).

Tras la reunión de esta mañana en torno a un café con churros y sin que en ella hubiésemos llegado a ningún acuerdo, celebramos esta segunda y vespertina en la que a diferencia de la matutina se celebró por la tarde y durante la misma no sirvieron churros con el café, quejándose por ello "el peluquero" y obligando a que esta falta constase en el acta de la reunión.
A las 16:36 horas, es decir, a los 6 minutos de comenzada la reunión el Sr. Pepe se percató de la ausencia de representación de la autoridad, por lo que se requirió la presencia de Hipólito, presidente de la comunidad de vecinos del edificio.
Una vez personada esta persona, comenzó la reunión tomando la palabra en primer lugar Ramón "el camarero", quien tras una exposición de sus argumentos acabó pidiendo la dimisión urgente de Shuster.
Las palabras de Ramón fueron rebatidas por Hipólito el presidente de la comunidad” y culé hasta la médula, que se volvió contra el hostelero y al que acusó de que los olores de su cocina llegan hasta su vivienda en el tercero.
Intervino a continuación el chino de la China y propietario del todo a 1 euro, quien puso sus argumentos sobre la mesa y protestó muy enérgicamente cuando y por estar mojada le estropeó un paquete de tabaco, según sus palabras y de las que yo doy fe como testigo.
La respuesta fue tan enérgica que a continuación y por alusiones tomó la palabra Ramiro el electricista” en representación del sector energético, al que tras una breve intervención se le escapó un pedo, alegando en su defensa que llevaba unos días padeciendo flatulencias a causa de su enorme afición a la fabada asturiana.
Y para hablar de flatulencias y fluctuaciones intervino la representación de la banca, la Sra. Remedios, que dio a Ramiro una receta a base de poleo menta y zumos para hacer más llevadero el flato de la fabada.
Tomó la palabra en penúltimo lugar Pepe, “el albañil en paro”, el gran beneficiado de la reunión, pues salió de allí con trabajo al serle encargada por parte de Ramón el camarero”, la reparación de la chimenea de humos del local que afecta directamente a Hipólito, al que de un tiempo a esta parte su dormitorio huele a croquetas de pollo, hecho este que no puedo testificar, pero sí el que Pepe se comprometió a realizar la obra y no cobrarle el I.V.A.
Me tocó intervenir de último y dado a que me había pasado con el tiempo para el café, dije que sí a todo y felicité a los demás por haber llegado a un consenso.
Tras mis palabras, todos se pusieron en pie y aplaudieron, lo que el hostelero celebró poniendo unos pinchos de tortilla.

CONCLUSIONES DE LA REUNIÓN:

Dado que la reunión se llevó a cabo con el fin de refundar el capitalismo y puesto a que todas las partes llegamos a un buen acuerdo pese a la ausencia de churros con el café, declaramos refundado el capitalismo, así como el compromiso verbal de adoptar juntos unas medidas urgentes para hacer frente a la crisis, y que son crear una porra y fundar una peña quinielística, de la que me han nombrado tesorero, por lo que salí del bar con 12 euros más en el bolsillo y ahora que recuerdo, con el café sin pagar.

Café, churros y finanzas.

Solbes tiene razón al decir que "no se puede tomar un café con churros por la mañana y por la tarde refundar el capitalismo". Esto lo acabo de comprobar yo ahora mismo, que vengo de tomar un café con churros durante el cual y tras una conversación con el camarero, el peluquero y el dependiente de la tienda de aquí al lado, hemos llegado al acuerdo de reunirnos otra vez a la tarde para intentarlo de nuevo.
Al principio de la conversación daba la impresión de que lo lograríamos, pero cuando el peluquero abrió el Marca y nos comunicó la eliminación en la Copa del Real Madrid, adiós crisis, adiós economía y adiós consenso (el camarero es un forofo merengue con muy mal perder y con el que es imposible dialogar). Y así señores, señoras y señoritas, no se levanta un país.
Pero esta incursión en lo deportivo no fue más que un pequeño lapsus que duró hasta que en el bar irrumpió una persona perteneciente al sector de las finanzas, la Sra. Remedios, que es la mujer de la limpieza en la Caja de Ahorros y Monte Piedad de aquí al lado.
Vestida con su bata azul verdoso y sin quitarse los guantes, la Sra. Remedios dio una charla de economía que nos dejó boquiabiertos a todos, sobre todo en lo referente a los últimos movimientos de la bolsa, asegurando ella como experta en el tema, que las únicas que se salvan son esas negras del tamaño de un saco, asegurando que su gran capacidad y consistencia las hace más resistentes que el resto al ir, venir, subir y bajar característico de éstas, y decatándose descaradamente por la prohibición de que los bancos recojan la basura en la típicas bolsas de supermercado, aunque sólo sea por ética y estética.
Y todos los presentes le dimos la razón e imitando al gobierno de la nación, hicimos escote para entre todos invitarla al café.
Es por ello que hago esta entrada, más que nada para dar la razón al Sr. Ministro y para advertiros de que estamos trabajando en ello y que las cosas van por muy buen camino.
Yo espero que con el café de la tarde seamos capaces de llegar a un acuerdo, eso sí, siempre y cuando consiga una silla en la que sentarme, pues a mi igual que a Zapatero, no me va eso de asistir a conferencias de pie y apoyado en la barra.

Ahora os dejo un vídeo que dedico a mi amigo el camarero, un madridista acérrimo muy afectado por la crisis blanca.

martes, 11 de noviembre de 2008

Por el arenal vienen los Reyes

Estamos a 11 de noviembre, lo que quiere decir que dentro de muy poco tendré que pensar ya en montar al árbol de Navidad, con sus cintas, sus adornos, sus bolas, sus luces de colores y la estrella anunciadora en la punta.
Advierto para que no se me enfaden los ecologistas que el árbol que pongo es de plástico, también y para que no se enfaden los no creyentes, el que sé de muy buena tinta que los Reyes Magos no existen, lo que he descubierto hace muchos años al ver escrito en un rompecabezas que me habían dejado “para Manolito”, con la inconfundible letra de mi madre y también tras comprobar que se les dejaba para beber una copa de Veterano, que era el coñac que más le gustaba a mi padre.
Parece mentira pero estos detalles no pasan desapercibidos para un niño, de hecho el mío descubrió quienes eran los reyes cuando al querer dejarles también un tentenpié, yo le exigí que les dejase unas galletitas de chocolate, un cigarro y una cerveza.
-Que casualidad papá, que los reyes tengan tus mismos gustos- me dijo muy suspicazmente el chaval, ante lo cual se activó mi ingenio y para evitar darle más pistas le pedí a un vecino quien escribiese en su regalo “para Guille”, motivo por el cual y tras reconocerle la letra, el crío se creyese que este vecino era su padre.
Los niños no son tontos aunque se lo saben hacer muy bien cuando les interesa, de hecho un año que el mío escogía sus regalos en la revista de unos grandes almacenes y viendo que eran más los que marcaba que los que dejaba, le dije que no pidiese tantas cosas que los reyes ese año estaban pobres, a lo que me contestó que eso ya lo sabía, pero que también sabía que el día 22 cobraban la extra de Navidad, lo mismo que sabía que pagan con tarjeta y que no le cargan la compra hasta finales del mes siguiente.
Lo cierto es que creyéndolo o no, el día de Reyes es el día grande de las fiestas navideñas, porque ¿hay algo que alegre más a un padre que el que sus hijos se levanten ese día a las 8 de la mañana y que se pongan a jugar y hacer ruido por la casa?. Sí, bueno, quedarse durmiendo hasta las 11 de la mañana también alegra mucho, pero no tanto como lo otro.
Y es que ver la sonrisa y la alegría de un niño es algo que no tiene precio, o sí lo tiene, pero hoy en día y tirando de tarjeta de crédito esa ya no es excusa, además un niño se conforma con poca cosa. Más jodido y más caro es arrancar la sonrisa de la mujer con un regalo, que parece mentira en ella que con esta crisis y sabiendo que los Reyes Magos no existen, tenga el atrevimiento de pedir un regalo de joyería.
Otra que también se lo sabe montar, porque desde hace unos días ya anda por la casa un catálogo de joyería y que un día encuentro sobre la mesita de la sala, al otro sobre la mesa de la cocina y al otro en la mesilla de noche, y que a medida que se vaya acercando el día veré estratégicamente posado por otros sitios de la casa.
Y claro, tanto va el cántaro a la fuente que al final no te queda más remedio que coger ese catálogo, echarle un vistazo y comprobar que ya ha marcado varios artículos con un rotulador rojo y gordo para que no me pasen desapercibidos. Y esos trazos, esa forma de envolver la joya en un círculo rojo son como la letra de mi madre, inconfundibles.
En fin, que falta poco para la Navidad, así que este fin de semana tendré que comprobar en que estado está el árbol así como el mío financiero, sin dejar de mirar a cómo está el barril de petróleo, que tal como está la gasolina a ver quién se atreve a asegurar que este año los Reyes den llegado.

P.D.
Esta pasada noche me llevé un enorme chasco al pensar que mi esposa quería tema y que por eso me metía mano, al final resultó no ser por eso si no que me tomaba la medida, lo que me hace suponer que este año los Reyes me traeran unos calzoncillos.

viernes, 7 de noviembre de 2008

A la séptima, la vencida

Hoy tengo muchas cosas sobre las que me gustaría escribir, de hecho tengo media docena de entradas empezadas y que he plantado al llegar al primer punto y aparte.
Esta que estás leyendo es la séptima, eso dando por supuesto de que logre acabarla, porque a lo mejor hay una octava, una novena o incluso una décima. De ahí para arriba no, porque si a los diez intentos no publico, pongo un vídeo y a otra cosa mariposa.
Lo de mariposa forma parte de una frase ya hecha, así que cuidadito con lo que piensas que yo no soy de esos. Yo soy heterosexual, y soy uno de tantos que fantasean con probar la bisexualidad al menos una vez en la vida.
Sí, qué pasa… ¿es que a ti no te gustaría acostarte con dos mujeres a la vez?. A ver si ahora voy a ser yo el único pervertido de la blogsfera.
Que yo sepa y por las encuestas realizadas a lo largo y ancho de mi vida entre mis amigos y conocidos, un porcentaje muy grande de hombres sueña con mantener relaciones sexuales con dos mujeres a la vez. De ese porcentaje, algunos realizan ese sueño, mientras que otros no, habiendo algunos que no se despiertan a tiempo y cuando lo hacen tienen las sábanas mojadas.
En cambio otros sí despiertan a tiempo y bien más tarde o en ese mismo momento, se van al cuarto de baño y allí se las cepillan a mano. Ahora te estarás preguntando en cual de esos porcentajes estoy yo, ¿a que sí?... Y a ti qué coño te importa.
Has de saber que un hombre de mi integridad moral no anda diciendo por ahí que si se masturba o no.
Y ahora que hablo de esto me viene a la mente algo que ayer vi en un programa de la tele, "El juego de tu vida", uno de esos que tienen que ver con la máquina de la verdad, ya que la presentadora hace una pregunta relacionada con la vida del concursante y según la respuesta de éste, la daban por verdadera o falsa.
La verdad es que hay que tener poca vergüenza para ir a un programa de esos. Por mucho dinero que te lleves no creo valga la pena pasar por un trance como el que ayer tuvo que pasar el concursante.
En el plató estaban aparte de éste, que era un hombre de entre 50 y 60 años, su mujer, su madre y su cuñada. Y la pregunta era la siguiente:
-¿te has masturbado alguna vez pensando en tu cuñada?-
Momento en el que la cámara enfoca a la cuñada que sonríe y pone cara de quedar volada, no sé si ante la susodicha pregunta o ante la imagen que se debió formar en su cabeza del cuñado pensando en ella y dándole que te pego en el baño. Después enfoca a su mujer que sonríe con cara de aquí no ha pasado nada. A continuación lo enfocan a él, muy serio y con cara de trágame tierra.
Unos segundos de intriga y la respuesta del concursante: SI.
¿Y a partir de ahora qué?, me pregunté yo al escuchar la respuesta. ¿Cómo serán las cenas familiares de las navidades cada vez que se reunan?.
Por un lado la cuñada, sabiendo que el marido de su hermana se la casca a su salud. Por otro lado la mujer, sabiendo que su marido se la casca pensando en su hermana. Y por otro lado él, pensando en cuanto se acaben los mazapanes corro al baño a darle una sacudida. Y mientras piensan, los langostinos a la plancha que se enfrían.
Y todo esto que yo me imaginé se fue al carallo cuando a la siguiente pregunta, el concursante reconoce que no satisface sexualmente a su mujer por tener eyaculación precoz.
Cara de chasco en la cuñada y que manera tan rápida de cargarse una cena navideña. Bueno, al menos así pueden comer los langostinos calientes.

jueves, 6 de noviembre de 2008

Bye, bye, Bush


¡Ganó Obama!, y puede que sea por eso pero hoy no ha llovido. Y puede ser también que también por eso hoy tres cuartos de este país llamado aquí, estén felices y contentos con la llegada del primer negro a la Casa Blanca, aunque en mi interior estoy convencido y casi apostaría a que alguno habría entre los empleados de servicio.
Supongo que uno de los más contentos será Miguel Ríos (guay del Paraguay), que había amagado con no sacar al mercado su nuevo disco en señal de protesta en caso de que no ganara Obama.
Lo que hizo que los norteamericanos acudieran acojonados a votar en masa por el demócrata, ya que nadie quería quedarse sin el último trabajo del granadino. Y puesto que ganó su candidato, el amago se convierte ahora en una seria amenaza para los españoles: habrá disco del intelectual Miguel (guay del Paraguay).
Lo cierto es que no le viene mal a la Casa Blanca un cambio de color, aunque me temo que más o menos las cosas seguirán yendo como hasta ahora, pues si de algo estoy convencido es que los norteamericanos o son muy de derechas, o derechas a secas.
Yo me alegro de que por fin un negro haya llegado en la realidad a ser Presidente de los Estados Unidos, y digo en la realidad porque que yo recuerde ya hubo dos anteriormente, ahora bien, no me preguntes por los nombres de los actores ni por los títulos de las películas.
Quien también está muy contento por la victoria del demócrata es Pepiño Blanco, alias "Pepiño", que se ha ido a los EE.UU. supongo que a verificar que las elecciones fuesen limpias y de paso ayudar a que ZP encuentre su anhelado punto G.
Y de allí partió hacia Cuba, pero no sé si a llevar dinero o si para reforzar las relaciones normales entre dos países democráticos. Como debe ser, que coño.
Por cierto que comentaba el otro día Zapatero que sí irá a la cumbre, y además aseguraba irónicamente que no estaría de pié, es decir, quiere sentarse igual que se sentó el famoso día del desfile, que se quedó calentando la almorrana al paso de la bandera americana.
Esperemos que los gringos se hayan olvidado este pequeño detalle, porque si no me temo que nuestro presi no pisa la oscura Casa Blanca ni para hacer de becaria, y eso que se le ven muchas ganas.
Sin duda alguna lo mejor de todo es que George W. Bush, el peor presidente que ha parido la patria norteamericana, se va, y aunque sólo sea por eso, hay que decir que hoy ha sido un gran día, la pena, la gran pena, es que este día llega demasiado tarde y que no será fácil limpiar la mierda que ha esparcido por el mundo.

martes, 4 de noviembre de 2008

Ordenando mis pensamientos


Hoy quise ordenar un poco mis pensamientos y no he sido capaz de hacerlo, pues en cuanto me puse a ello mi mente se quedó fijada en el primero que me vino a la mente y se olvidó del resto.
Este pensamiento se me metió tan entre oreja y oreja que cada vez que quería pensar y ordenar el resto aparecía de primero repitiendose machaconamente "ordena el trastero, ordena el trastero"… y así hasta que aburrido me decidí por dejarlo para un día de estos, tanto lo de ordenar el trastero como los pensamientos, a fin de cuentas ambas cosas tienen mucho parecido.
Porque ¿qué es lo que suele haber en un trastero?... en el tuyo no sé, pero en el mío mucho trasto viejo. Tampoco sé que pensamientos tienes en tú cabeza, pero en estos momentos en la mía sólo hay uno: ordena el trastero, ordena el trastero
De saber esto a buenas horas me hubiese puesto yo a ordenar los pensamientos. Sí a fin de cuentas lo único que quería era tenerlos colocados por orden alfabético.
Así aprendo para la próxima, pues de haberlos ido almacenando ordenadamente a medida que los iba pensando no tendría ahora este problema, pues hubiese comenzado por los de la letra “A”, de “aliméntate” y cuando llegase a los de la “O” de “ordenar trastero”, a lo mejor el trastero ya lo tenía ordenado mi señora.
Todo hombre que se precie debe tener los pensamientos bien clasificados y en perfecto orden para saber en todo momento lo que piensa y si es preciso exponerlos cada cual en el lugar que le corresponda, bien numéricamente o alfabeticamente.
Así a la pregunta que algunas veces nos hacen a todos de: ¿en qué estás pensando?, uno puede responder sin temor a equivocarse.
Por ejemplo, que queréis saber lo que pienso ahora, pues no hay problema.
Podría responder por orden alfabético y comenzando por la “A”, de: “acabar de una puta vez esta entrada”. En cambio si respondiese por el orden numérico de mis preferencias empezaría por la “S”, de “sexo”.
¡Ah!, pero como resulta que todavía no los tengo ordenados, me sale de primero la “O” de “ordena el trastero”, el cual no se corresponde por orden alfabético y mucho menos por el de preferencias.
Y esto es una cosa muy importante ya que al contrario de lo que mucha gente piensa, en el tema de los pensamientos el orden de los mismos sí altera el producto, ya que si por ejemplo a mí se me diese por pensar en este orden: primero acabar esta entrada y segundo ordenar el trastero, poca disposición me quedaría para realizar el tercero, el sexo, y que a la postre es el que más me interesaría.
Lo lógico y con la cabeza bien ordenada sería, primero acabar esta entrada, lo que después de 30 palabras más haré poniendole el punto final al texto. Segundo entregarme al sexo y por último esperar a que el trastero me lo ordene San Pedro, o en su defecto mi mujer.

lunes, 3 de noviembre de 2008

Yanquis go jom

Desde que los domingueros españoles dejaron de llevar a las excursiones la tortilla y los filetes empanados en la tartera o en la fiambrera y comenzaron a llevarlos en un tupperware, a este país de países llamado aquí, está tan americanizado que ya no lo reconoce ni la madre que lo parió.
La semana pasada se celebró el Halloween, fiesta que las películas de terror norteamericanas han puesto de moda aquí, desplazando la nuestra y tradicional celebración de “Difuntos”, dada a recordar y llevar flores a los susodichos muertos, los que con la americanización de la celebración, dejan de ser difuntos para convertirse en zombies.
Y no es la única costumbre que copiamos de los Yanquis en detrimento de las nuestras, ya que si ahora es esta fiesta, antes fueron las hamburguesas y perritos calientes las que desbancaron al bocata de chorizo o al de jamón serrano.
Y eso es algo que yo no entiendo, porque no hacemos más que ponerlos podres y luego los imitamos en todo. Es cierto que hay cosas que sí deberíamos copiarles, pero coño, fiestas o comidas creo que deberían ser las últimas en las que los imitemos.
Una muestra de nuestra americanización es el seguimiento que se ha dado aquí a las elecciones para la presidencia de los Estados Unidos que se celebrarán mañana. Y es que las hemos vivido casi como si fuesen las nuestras, con anuncios y programas en la tele y en la radio hablando todo el santo día de ellas. Yo estoy de ellas hasta los mismísimos.
Por lo que veo, aquí todo el mundo está con Obama, que es el oscuro del traje negro (a él no le digo negro para que nadie me acuse de racista). Además veo que hay gente que se toma estas elecciones como propias y celebran por adelantado la victoria del demócrata.
Yo ni sé, ni entiendo, pero tanto jolgorio a cuenta de los Yanquis me tiene un poco mosqueado ya porque no sería la primera vez que esperamos nos den una alegría y luego pasan de largo, dejándonos con la cara de tontos, vestidos de folclóricos y dándole a la guitarra. Acuérdate si no de “Bienvenido Mister Marshall”.
Pero ya que hablo de las elecciones de aquel país, debo resaltar lo diferentes que son de las nuestras, y menos mal, porque si ya las campañas aquí son pesadas, las de allí son un coñazo, sobre todo por lo que duran.
Pero sí es de envidiar que en sus campañas intervenga un fontanero o una macizorra como la Sarah Palin para calentar el cotarro, a la que por cierto le han encontrado una doble para protagonizar una película porno.
Hacen ahora aquí una película porno con dobles de políticas españolas y no veas la que se arma.
En este momento no es probable, pero los Yanquis ya han dado la idea, sólo es cuestión de esperar a la próxima campaña electoral y ver si también en eso los copiamos. Quién sabe, a lo mejor tendremos que ir a ver los mítines de De la Vega, Cospedal y cía. a una sala X.


A una candidata así, ¿qué hombre le niega un par de votos?

domingo, 2 de noviembre de 2008

Resultado de la encuesta


Distinguidos lectores, queridísimas lectoras, como todos sabéis hace unos cuantos días comencé una guerra sin cuertel contra el tabaco, pues bien, hoy debo deciros que me está pegando tal paliza que se me están quitando las ganas de meterme en más guerras.
Pero cuidado, que no sabe el cigarro con quién está tratando, porque yo sigo en guerra, también fumando, pero en guerra.
Había colocado una encuesta en el blog la cual ya está cerrada, simplemente para ver hasta dónde la gente confiaba en mí… y, ¡manda carallo!, que poca confianza.
Agradezco la sinceridad de los 3 que han votado la opción a mi qué me importa, la confianza de los 6 que han votado para siempre y me abstengo de decir nada de los 5 que votaron para que me fumase un cigarrillo. Con gente así no vamos a ninguna parte.
De todos modos, agradezco la participación de todos los participantes y participantas, mientras que a los que no lo han hecho, no se lo agradezco.

¡Ojo, pringa!...

Hola, ¿qué tal?... yo recuperándome poco a poco del trancazo, padeciendo sus últimas secuelas.
Parece mentira que tan poca cosa como un simple resfriado pueda joder tanto. Digo poca cosa porque afortunadamente de eso no se muere, aunque cuando estás muy tocado puede dar la impresión de que la vas a palmar ahogado en tus propios mocos mientras duermes. Al menos eso me pasó a mí.
No me explico de dónde coño puede salir tanto moco. Sí, ya sé que de la nariz, pero lo que yo me pregunto es ¿cómo es posible que en la cabeza se pueda fabricar tanto líquido elemento?...
Es que ni que tuviese una fuente de colores dentro de la nariz, porque yo estuve cinco días expulsando mocos en sus tres versiones y colores.
La primera de agüilla transparente y continua acompañada de estornudos, la de andar con la gota en la punta de la nariz. De ahí me salio líquido como para regar un huerto.
Después de un par de días así el moco tiende a espesarse mediante un proceso de semi solidificación. Bueno, esta es una forma mía de decirlo, porque ese proceso ni siquiera sé si existe.
Lo que quiero decir es que el moco tiene un cuerpo entre líquido y sólido…igual que la nocilla, que por esa forma que tenía en los envases de dos colores venía separadita y sin mezclarse, medio vaso blanca y medio vaso marrón.
Bueno, pues el moco en su segunda versión es más o menos así pero en tono verdoso. Está pegado al tubo respiratorio como los percebes a las rocas y por mucho que tosas, tosas, y vuelvas a toser, como no le metas dinamita no los despegas del cuerpo.
La dinamita es el jarabe que los ablanda y los hace salir para fuera, y al menos a mí me salieron por todos los orificios menos por las orejas. En esta fase el moco adquiere un tono amarillo maduro.
Pues así cinco días con sus cinco noches, y a base de pastillas de chupar, efervescentes, de tragar y jarabe. Y aun así parece que no te lo das sacado de encima.
Recuerdo que cuando era chaval mi madre arreglaba esto con un supositorio de Cibalgina, que aparte de hacer bien, el hecho de que me lo tuviesen que meter por el culo hacían efecto placebo y un supositorio a veces me curaba por la cuenta que me tenía.
Je,je, anda que no se las hacía pasar canutas a mi madre cuando me tenía que ponerlos. Tenía la pobre que ponerme boca a bajo a la fuerza y echárseme encima para inmovilizarme, con esa destreza que tienen las madres me abría el culo a la fuerza y para dentro el torpedo.
Y yo para fuera… Y ella otra vez para dentro… Y yo otra vez para fuera… Y ella otra vez para dentro…
Igualito que un polvo, hasta que ella se cansaba del mete saca y dejaba un par de minutos su dedo clavado en mi culo como si fuese una banderilla.
En fin, que sigo vivito y coleando, aunque también tosiendo de vez en cuando y echando también los últimos mocos que me quedan, pero ya en condiciones de ponerme a esto porque siento como a medida que me van saliendo, me va llegando la inspiración para escribir y eso debe ser, sospecho, a que los mocos me llegaban hasta el cerebro.
Te imaginas… los sesos pringados de mocos… ¡puag, que asco!.