miércoles, 15 de abril de 2009

Tres pelos en las orejas

El otro día hice la entrada 500 y me pasó totalmente desapercibida hasta ahora mismo. No me explico como pudo ser que no me diese cuenta de ello siendo yo contable, seguro que es cosa de la edad.
Es que me estoy haciendo mayor. En julio cumpliré 49 años, ya estoy a punto del medio siglo de vida, jeje.
Miro para atrás y me doy cuenta de lo rápido que ha pasado el tiempo, y sin embargo miro para delante y sólo veo lo que estoy escribiendo. Pero sí que corre, sí, según los relojeros a una velocidad de 60 segundos por minuto, aunque a veces parece que se pasa muy por encima los límites de velocidad.
Parece que era anteayer cuando me ponía como un toro cada vez que veía las bragas en el tendal de la señora Milagros, la vecina maciza que tenía yo a los 17 (sí, siempre me gustaron las cuarentonas y mira tú el tiempo que tuve que esperar para tener a una), y aquí estoy hoy, con un hijo que en julio cumplirá 18 y una niña que cumplirá 12.
Estoy envejeciendo, poco a poco pero ya voy apuntando alguna que otra manera. Digo esto porque hoy me he visto tres pelos enormes en el lóbulo las orejas. Tres en cada una, dos de ellos negros como los cojones de un burro y el otro blanco como la barba de Papá Noel.
Y estos han crecido a su libre albedrío por la costumbre mía de mirarme al espejo sin gafas. Y claro, con 2,5 dioptrías de miopía en la escala Richter la visión no es muy nítida, sobre todo con el espejo empañado.
Me acerco a él para afeitarme pero me miro para la barba no para las orejas, quién coño me iba a decir a mí que me saldría bigote en ellas.
Ahora me viene a la memoria otro vecino de la infancia, Marcelino, a quien apodaban “el 1.500” por culpa de sus orejas, que aparte de tenerlas enormes eran de soplillo y cuando lo mirabas desde atrás parecía un Seat 1.500 con las puertas delanteras abiertas.
Caigo yo hoy en boca de algunos de aquellos con esos pelos en las orejas desplegados al viento y vete tú a saber el apodo de qué bicho me pondrían.
Pero fíjate que el hecho de tener ahí tres pelos no me importó demasiado, me jodió más que uno de ellos fuese blanquito blanquito igual que la barba de Papá Noel como ya he dicho.
Eso sí, nada comparable como cuando encontré mi primera cana en el pelo de los huevos. Ahí sí que me quedé frío de la impresión, pero tiré de él y nunca más… un momento… no, nunca más, comprobado y bien comprobado ya que ahora mismo sí tengo las gafas puestas.
Impresionada ha quedado mi churry ahora que me ha visto bajarme los pantalones y mirarme los cojones. Menos mal que ya me conoce…
Ya le vale también a la parienta que no me avisa de estos pelos. Ves, estas cosas pasan también por follar con la luz apagada, porque con ella encendida habría un porcentaje muy alto de posibilidades de que tuviese mis orejas a la altura de sus ojos y ya me los habría visto.
Pero bueno, eso de hacerlo con la luz apagada en parte es culpa mía porque la última vez que lo hicimos con ella encendida me soltó en pleno polvo que el techo necesitaba una mano de pintura.
Fue unos días antes de su cumpleaños, y yo que poseo el don innato de captar las indirectas a la primera, pillé esa como creo que ella pretendía con ese comentario y para su cumple le regalé un rodillo, un bote de pintura y un frasquito de tinte azul por si quería darle tono. Tengo muy buena memoria y recuerdo esto como si fuese la semana pasada.
En fin, hasta aquí llego. Corto y cierro porque creo haberme extendido demasiado para hablar de tres puñeteros pelos.
Por cierto que también me está saliendo un grano en el pescuezo, pero de eso ya hablaré mañana, si me acuerdo.

11 han comentado:

Amio Cajander dijo...

pues tira de ellos que ha de doler menos en las orejas que en los buebos.

Carmen dijo...

Pues claro que esos pelos son cosas de la edad.
Yo cumplo 44 y también me pasan cosas... de la edad.

Nos toca resignarnos y... "que nos quiten lo bailao". Mejor pensar así.

Un besito

PD: Ten cuidado cuando tires de los pelos en zonas nobles jajajja

Vitalnn dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Vitalnn dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Vitalnn dijo...

lo del techo tiene delito,jajajaja.

Y lo de las canas, míralo por el lado bueno, al menos tienes pelo!!!

No seas exagerado, que no es p´tanto, hombre yá.

Saludos amigo!!!

Aspective dijo...

Amigo, si te crecen los pelos de:
- las orejas
- la nariz
- las cejas
empieza a buscar que asilos de la 3 edad te gustan porque están entrando irremediablemente en un proceso irreversible que se llama segunda juventud (por ser amable)

A mi, lo que me ha dejado profundamente preocupado es el momento de realizar el comentario sobre la pintura del techo.
¡¡Tremendo!! ¿y pudiste rematar? Si es que sí, eres un fenómeno

Eulogio Diéguez Pérez (Logio) dijo...

Yo hasta hace poco ni sabía que existían ese tipo de pelos, malditos sean.

El sábado vi a un conocido que no había visto en el último cuarto de siglo, o sea, desde anteayer... mi mujer dijo que nos mirábamos como marcianos y que la palabra mas usada en la conversación fue "no puede ser". Pues fue.

Jose Antonio dijo...

Seguro que te pasa lo que a muchos y es que cuando nos miramos en el espejo ya no nos reconocemos, en cambio cuando vemos una foto vieja (endiendase de cuando eramos jovenes), nos decimos, pero que guapos estamos.

Saludos Cordiales.

Moisés P. dijo...

jajajaja felicidades por esas 500 entradas¡¡¡. Sólo nos queda la resignación de saber que muchos tenemos algúnque otro pelo blanco
saludos Manolo

darkmanburt dijo...

Tres pelos no son na. Fijate los que tiene ZP en la ceja que le crecen como puas.

Ea que hay unas maquinillas especiales para eso pidelo por tu cumple.

Adios

Anónimo dijo...

pues con tres pelos ya te puedes haccer una trenza!!! jajajaja lo de los huevos es normal, eso te pasa por intentar mear sin salpicar y no apartar la vista del cipote jajajaja

qué bueno

adió manué