martes, 21 de diciembre de 2010

Gracias "Padrino"

Distinguidos lectores, queridísimas lectoras, señores, señoras, señoritas, gueis, gais y en general a todos los que me leáis. Antes de nada quisiera desearos buenos días por la mañana, o buenas tardes si es que me leéis por la tarde.
Como ya todos sabéis hace un año que comencé un periplo que ya se hace demasiado largo para ser operado de la rodilla de mi pierna sana, la cual en estos momentos está casi tan jodida como la enferma.
A lo largo de todo este año he sido víctima de mentiras, tomaduras de pelo, respuestas impropias por parte de dos inspectoras del E.V.I. con respecto a la minusvalía que padezco en la pierna izquierda desde que tenía 1 año de vida.
Pues bien, harto ya de que me tratasen como una marioneta y que me hiciesen andar de aquí para allá y de allá para acá, e indignado con el menosprecio que mi discapacidad estaba recibiendo, tuve un momento de lucidez y recordé que en este país llamado aquí no sólo hay que tener padrino para bautizarse, sino que incluso lo hay que tener para curarse de una enfermedad.
Ante la imposibilidad de acudir a mi padrino por estar este fallecido y teniendo en cuenta de que aun en caso de que viviese poco podría hacer por mí al tratarse de un simple barrendero, me he puesto las pilas y me he buscado un padrino nuevo, encontrando en la prensa el que mejor me podría ayudar en mi caso.
Por ello tuve que recurrir al periódico para que la voz de mi “padrino de adopción” llegase a los sordos oidos de quienes gestionan el funcionamiento de la sanidad de aquí dentro de este país también llamado aquí.
Mi nuevo padrino colaboró conmigo y hoy saca en el diario La Voz de Galicia una nota de prensa haciendo referencia a mi caso, por lo que desde aquí le envío mi más sincero agradecimiento al Sr. Xoel, redactor de dicho periódico, por su comprensión y su ayuda.
Ahora sólo me toca esperar que la nota que mi “padrino” publicó en la prensa y que ésta surta efecto en los funcionarios que hasta el momento se han ocupado de mi caso a la hora que les coincidía no sé si con el café o con la siesta. Por lo que espero que de una puta vez se despierten y me vuelvan a dejar como antes, cojo sólo de una pierna y a lo que ya estaba más que acostumbrado, ya que ser de las dos es doloroso, aparte de ser muy incómodo y jodido.
Aquí os dejo los enlaces donde podéis leer la noticia, al mismo tiempo que repito mi agradecimiento al redactor y el medio que se hizo eco de mis andanzas en busca de una solución para lo que sería una simple artroscopia que me deje como antes, es decir, sólo medio renqueante.

http://www.lavozdegalicia.es/santiago/2010/12/21/0003_8922598.htm

http://www.lavozdegalicia.es/santiago/2010/12/21/0003_8922599.htm

P.D. Esta entrada se la dedico a Fermín ya que ambos participamos en la misma guerra, al mismo tiempo quiero tranquilizar a su esposa, a la que de un tiempo a esta parte molesto con mis llamadas telefónicas preguntando por él. A ella quiero decirle que aunque lo llame con frecuencia puede estar absolutamente tranquila y que pese a mi pesadez con tanta llamada telefónica, la cosa NO ES LO QUE PARECE, y que entre Fermín y yo no hay nada, aparte de la cojera y la coronilla pelada.

domingo, 19 de diciembre de 2010

Rajada después de la calentura

Distinguidos lectores, queridísimas lectoras, señores, señoras, señoritas, gueis, gais y en general a todos los que me leáis. Como ya habéis comprobado todos los que entre ayer y hoy os habéis pasado por aquí, he retirado mí última entrada siguiendo los sabios consejos de quienes han dejado sus comentarios en ella.
He de decir que la entrada ha sido escrita en un momento de calentura (últimamente son las únicas calenturas que tengo y debo reconocer que hecho en falta las de otro tipo, y como lo debo reconocer, lo reconozco).
No sólo han sido los consejos de mis sabios lectores, sino que también he seguido los de otro sabio en su materia y del que creo que mejor me será seguir sus consejos, es decir, pase lo que pase mejor no dejar pruebas y que parezca un accidente.
Por lo que pido por favor a quienes hayáis leído la entrada que si algún día un fiscal os interroga digáis que no sabéis nada.
¿Quedamos en eso?... bien, ya sabía que podía confiar en vosotros.
Y ahora para disimular y para rellenar hueco os voy a poner las fotos de mis últimas pinturas y al mismo tiempo deciros que esta actividad es la que más me relaja y que desde que se me dio por agarrar el pincel debo llevar ya unos 15 cuadros pintados y que casi todos los he regalado, y que si atiendo a las peticiones que tengo no tendría más remedio que dedicarme a eso de pintar, lo malo es que los regalos no dan de comer.
Y como yo me llamo Manolo y no Modesto, voy a tirarme un poco el moco y decir que cada cuadro me sale mejor, y que yo mismo me asombro de lo bien que se me da y al verlos me cuesta creer que yo haya sido capaz de pintarlos.

La primera foto, es decir, la que está encima de este texto, la titularé: La prueba, ya que sirve como prueba evidente de que soy yo quien los pinta.
El título se lo aplico también por el cartón que se me ve en la coronilla, el cual me sirve de prueba de que mis hijos no mienten cuando me dicen que tengo la coronilla pelada.

Este segundo cuadro lo titulo : ¿Quién maneja mi barca?. Evidentemente el título viene dado a que no hace falta tener ojo de águila para darse cuenta de que en la barca no hay marinero que la maneje.
No, no está ni escondido ni agachado, cosa que puedo asegurar sin ninguna duda porque el cuadro lo he pintado yo y no me salió de los cojones ponerlo.

Y por último este otro del cual no se aprecia el tamaño, pero para que os hagáis una idea de las dimensiones diré que lo he colgado en la cabecera de mi cama y la ocupa por completo.
A esta obra la he titulado : Ni geranios ni claveles. Y lo he titulado así por la sencilla razón de que ni son geranios, ni son claveles.

Y nada más, simplemente decirles a quienes les pique la curiosidad por saber de que iba la entrada retirada: "joderos por llegar tarde".

miércoles, 15 de diciembre de 2010

¡¡¡ CURENME DE UNA PUTA VEZ LA PUPA DE LA RODILLA !!!... Cojones ya con la Seguridad Social

Distinguidos lectores, queridísimas lectoras, señores, señoras y señoritas en general, y de ahora en adelante para que nadie se sienta discriminado en este blog, añadiré a este habitual saludo al comienzo de todas mis entradas también a los maricones y mariconas, o siendo políticamente correcto mejor los llamaré gueis y gais, sin darle importancia al sexo, raza o religión... bueno, mejor matizaré que al sexo sí le daré la importancia que se merece, porque el sexo bien practicado da un gustirrinín que ni la Filomatic, sin embargo mal practicado puede causar dolor de cabeza en las mujeres (siempre antes de ponerse a ello), o dolor anal en los hombres (siempre después de acabar con ello) yo en particular nunca he padecido este dolor, pero tengo un amigo maricón que me contó que la primera vez le dolió mucho. A este respecto debo añadir que en una ocasión me hicieron un tacto rectal y hombre... doler lo que se dice doler, no dolió mucho... pero tampoco gocé y por joder el ego al médico que me introdujo su dedo en mí... ahí mismo, tampoco me molesté en fingir el orgasmo y eso que no me costaba nada.
Aclarado este concepto comienzo la entrada de nuevo.
Distinguidos lectores, queridísimas lectoras, señores, señoras y señoritas en general, así como gueis y gais que me leáis, si sois capaces de leer esta entrada quiere decir que no he llevado a cabo mi propósito de inmolarme en el hospital el pasado día 7 tal y como aseguré en mi anterior entrada. Si por el contrario no sois capaces de leerla os recomiendo que visitéis a un oftalmólogo, y hacerlo además ahora, pues se acerca la Navidad y según la publicidad de la tele cierta óptica te vende un par de gafas y pagando un euro más te dan dos pares. Así que aprovecha la ocasión y ya me lo agradecerás en otro momento.
Como decía unas líneas más arriba no me he inmolado tal como había prometido, pues tonto de mí que se me había olvidado que en los hospitales está prohibido fumar, y si por un cigarrito de nada te pueden meter un puro de cojones, no te quiero ni contar lo que me podría pasar si llego a prenderme fuego a mí mismo y por completo. Lo mismo me ingresan en la unidad psiquiátrica de pirómanos incendiarios, y lo que sería peor, con la rodilla aun sin operar.
También he dicho en mi anterior entrada que Matías Prats os daría la noticia de mi inmolación... pero ojito, no hace falta que estéis pendientes del telediario porque como he dicho no me he inmolado, aunque sí es cierto que estoy muy quemado. No tengo ni puta idea del nombre científico que define el proceso de llegar a quemarse sin llegar a prenderse fuego, aunque el vendedor de la ONCE del barrio a este proceso le llama ESTAR HASTA LOS COJONES. Y conste que el tipo pese a ser ciego sabe mucho de ciencias, no obstante y gracias a su afinado oído es capaz de distinguir entre el vuelo de una mosca y el de un mosquito, con un porcentaje de error del 2% y dependiendo del lugar en el que se encuentre. Por ejemplo en los wc públicos suele equivocarse con mayor frecuencia y muchas veces mea fuera de la taza o entra en el de señoras, aunque esto último a mí me tiene un poco confundido ya que en el 98% restante de los casos suele ir al baño de señoras después de que haya ido una señora o señorita a hacer uso del mismo (las malas lenguas del barrio dicen que tiene una amplia colección de pelos púbicos femeninos).
Y esto amigos, amigas e indefinidos en general, es cuestión de olfato. Porque eso sí, Pepucho, que así se llama el ciego del que os hablo, tiene un olfato de cojones pese a tenerlo en la nariz. Y para argumentar esto que acabo de decir contaré una anécdota que le ocurrió al bueno de Pepucho cierto día de verano cuando descansaba tranquilamente en un banco del parque a la sombra de un árbol de marca roble, en que se dio la circunstancia de que mientras él descansaba pasaba por la carretera un camión cargado de bacalao que Pepucho no vio por ser ciego y porque los ciegos no ven. Su olfato se activó al instante y cuando el camión se detuvo en el semáforo, Pepucho se volvió hacia el camión, y eso que no lo veía, y se puso a gritar como un condenado: ¡CACHONDA!, ¡TIA BUENA!, ¡QUIEN TE PILLARA!... Y así hasta que el semáforo se puso en verde y ahí ya no pudo pillarlo, porque Pepucho tiene buen oido y un maravilloso olfato, pero corriendo es bastante lento, no obstante salió a toda prisa tras el camión y todavía no regresó y eso que ya llovió desde aquella.
Si lo pilló o no nadie en el barrio lo sabe, pero con lo salido que era no me extrañaría que todavía anduviese revolviendo con su bastón entre las basuras que van al vertedero, porque eso sí, Pepucho con esas cosas era tan persistente y certero que allá donde ponía el ojo ponía el bastón.
Pero a lo que iba, sigo sin operar, sin fecha para la operación y cada día más jodido... ahora bien, inmolar no me inmolé, pero mañana a las 19:00 horas p.m. de la tarde (p.m.= pues del mediodía), un periodista de La Voz de Galicia me hará una interviu de esas pero no para hablar de Pepucho, sino para que le cuente los problemas que estoy teniendo para que me operen de una puta vez, para lo que llevo esperando 1 año y con un dolor de la hostia, y juro por Dios que no pienso dejar títire con cabeza aunque sufra represalias por ello, lo cual y dado ese caso, huiría de aquí en busca de Pepucho, que malo sería que con lo grande que es el vertedero municipal y gracias a mi vista miope y con la ayuda de su olfato y de su puntería con el bastón a lo mejor encontramos un menisco nuevo o valdría también uno de segunda pierna que esté poco usado.
Y sino y como mal menor, a lo mejor hasta encontramos los restos del bacalao y oye... quién sabe... a lo mejor si cierro los ojos al percibir el olor tengo las mismas sensaciones que Pepucho y me sube la líbido, que buena falta me hace también.

jueves, 2 de diciembre de 2010

En lucha contra el sistema del sistema

Distinguidos lectores, queridísimas lectoras, señores, señoras y señoritas en general. Después de un año de baja laboral por los problemas que en anteriores entradas os he relatado, me encuentro ahora en mi casa en zapatillas y pijama, disfrutando de unas merecidas vacaciones.
Y dirás tú... "coño con el tío, un año de baja y aun tiene el santo morro de decir que está disfrutando de unas merecidas vacaciones"... pues si es eso lo que piensas, ¿sabes lo que te digo?... mira... será mejor que no diga nada porque te puedes enfadar, porque estoy hasta los mismísimos "juguetes" de esperar a que me llamen para operarme.
1 año llevo en lista de espera y el próximo martes me veré cara a rodilla con el traumatólogo que supuestamente chafullará en el interior de mi susodicha rodilla derecha de la pierna derecha, la cual si estuviésemos tu y yo frente a frente vendría siendo la que vieses a tu izquierda.
Como ya he comentado en anteriores entradas, tengo también serios problemas en mi pierna izquierda, la cual si estuviésemos tu y yo frente a frente vendría siendo la que vieses a tu derecha, y eso sumado al menisco roto en la pierna contraria me impiden caminar, por eso y tras la baja y luego de currar 20 días medio arrastro y los mismos 20 días medio renqueante no me ha quedado más remedio que acudir a las vacaciones para evitar currar en estas circunstancias, pues no hace falta ser un experto matemático para saber que la suma de dos medios dan como resultado uno, y si un medio anda arrastro y el otro renqueante, el uno anda jodido, y como ya habréis conseguido descifrar mis sagaces y sagazas lectores y lectoras de este blog... ESE UNO SOY YO, por lo tanto y como habrás comprobado, si eres de los que has pensado que me pillé las vacaciones para rascarme los cojones, te has equivocado de "pe a pa", y te está bien empleado por ser un mal pensado...
Y ahora me vais a perdonar pero me voy a poner muy serio y amenazante, pero tranquilo que esto no es contigo, sino que es contra el sistema del sistema.
Señores y señoras, funcionarios y funcionarias del sistema de la Seguridad Social, por medio de ésta les advierto que si el próximo día 7 de diciembre no salgo de la consulta del traumatólogo con una fecha próxima para mi operación, o en su defecto un informe médico en el cual se haga constar mis enormes dificultades para caminar y se me recomiende una baja hasta la operación, YO MISMO ME INMOLO EN LA CONSULTA DEL DOCTOR... y no les hago aparte una huelga de hambre en la puerta del hospital porque no podría subsistir sin mis galletas de chocolate, aparte de que hace un frío de cojones... de ahí que opte por la inmolación (puestos a morir que sea caliente, que carallo).
¡A ver si no...!, no me quieren prolongar la baja en el INSS, no me quedan más vacaciones, casi no puedo caminar y mi jefe quiere sacar tajada de todo este asunto y visto lo visto y mis dificultades actuales tiene a bien ofrecerme el irme para el paro hasta que esté curado del todo y 3.000 euros como generosa compensación por mis 36 años y medio currando en la empresa... ¡tócate los cojones!... ¡como si el INEM o la SEG. SOCIAL me fuese a dar una paga por tonto!... pero si aquí todo Dios sabe que las pagas se las dan a los listos y listillos.
Lo que más me toca los cojones es que o apuran mi operación o tendré que claudicar ante el jefe, pues como me la retrasen llegará el día que no pueda caminar ni de aquí al retrete, y eso que lo tengo cerca, concretamente es la primera puerta a la derecha y la segunda es mi dormitorio, por lo que me estoy mentalizando de que si llegado ese día, por estrategia tendría que instalarme en el cuarto de baño.
Así que distinguidos lectores, queridísimas lectoras, señores, señoras y señoritas en general, atentos al Telediario del próximo día 7 de diciembre (como tengo cita a las 11:30 a.m. de la mañana supongo que ya lo podrán emitir en el del mediodía), porque puede ser que hablen de mí.
Imaginaos al Matias Prats dando la noticia:
"En un hospital de Santiago un paciente intenta inmolarse en la consulta de un traumatólogo porque éste se negó a operarlo en el acto del menisco roto en una rodilla. Afortunadamente la cosa quedó en un susto ya que el presunto suicida no tenía mechero encima"... ¡Hombre no!... puedo rociarme de gasolina... pero de ahí a prenderme fuego ¡por el carallo!.
Eso sí, les voy a meter un susto que se van a cagar por la pata abajo... Eso como Manolo me llamo.

(P.D., la imagen que muestro con esta entrada no tiene nada que ver con la misma, pero he buscado en google "inmolarse" y me apareció esta, os lo juro por Dios, y aunque la miro y la remiro, inmolarse, lo que se dice inmolarse, no parece que se esté inmolando, pero la tía mola mogollón.)