Ya estoy al pie del cañón
Distinguidos lectores, queridísimas lectoras, queridos amig@s, etc, etc, y etc. Desde el pasado viernes ya me encuentro al pie del cañón pese a tener la recomendación del psiquiatra de que bajo ningún concepto me reincorporase al trabajo. Lo he desobedecido y aquí estoy, reincorporado, produciendo, contribuyendo y dejando de lado la teta de la que últimamente estaba mamando: la teta del estado.
Eso sí, la he dejado muy al lado por si en caso de necesidad tuviese que echarle de nuevo la boca, lo cual no sé si será más pronto o mas tarde, porque sólo llevo cuatro días currando y ya estoy estresado y decaído, no por el trabajo en sí, sino por el trato, el ambiente y el entorno. Y es que en la empresa en la que trabajo hay demasiados capitanes para un sólo grumete. Y no creo que haga falta decir quien es el grumete, pero lo diré por si alguien no lo sabe: soy yo. Y no sólo soy el grumete, sino que desde que tuve la desgracia de caer enfermo también soy la chacha, el atrapa broncas, el culpable de todos los males de la empresa, el responsable de la crisis mundial, etc, etc y etc. Por resumir diré que soy la puta para todo.
Tras la bronca de la semana pasada con el patrón y que como os conté me provocó una crisis de ansiedad que me obligó a ir a urgencias y por la cual el psiquiatra me recomendó seguir de baja, cargado de ánimos y echándole un par de huevos, decidí agarrar el toro por los cuernos y presentarme en el curro y de paso presentarle mis cojones al jefe, cosa que no hacía desde hace muchos años.
Es que si los patrones en este país ya son así de explotadores y rompehuevos, en esta tierra gallega son todavía peores, y en cuanto te ven hipotecado y cargado de responsabilidades familiares te aprietan y te estrujan hasta que te asoma el hígado por la boca, y si a esto le añadimos la puta crisis del carallo y la escasez de trabajo, ya no te quiero ni contar lo que se pueden pasar con uno, con la consiguiente diversión que encuentran puteando a la gente.
Pero con una pieza como yo se dio de frente el astado, que cuando me hundo me hundo del todo, pero cuando resurjo lo hago con fuerza, tomo la muleta con la derecha y el estoque con la izquierda y ¡ale toro!, ¡ale!... y cuando el bicho entra al trapo, unos cuantos muletazos, un par de banderillas, estocada y otro toro p'al Manolo.
En estos momentos me encuentro dándole unos pases de Verónica, más otros de pecho y preparándolo para el picador al cual enviaré tras un pase de rodillas.
Creo que tod@s conocéis o habréis oído alguna vez eso que los patrones suelen decir a sus curritos: "soy la mano que te da de comer". ¡Y una mierda!, pues yo desde que dejé la teta y la papilla, nadie me ha dado de comer de su mano y puedo asegurar sin temor a equivocarme de que como yo solo y con mi mano derecha por ser diestro y aunque agarre el cuchillo con la izquierda.
El plato de comida me lo gano con mi trabajo y puestos a discutir quién da a quien, yo le diría a muchos: ¿quién te ha dado el chalé con piscina y cancha de tenis, el Mercedes último modelo, los coches de tus hijos, viviendas para ellos, el sueldo de la chacha y las vacaciones en Canarias?. ¿Quién?, ¿quién te ha dado todo eso mientras tú te pasas medio día de tertulia en la cafetería?.
El pasado viernes y nada más incorporarme al puesto lo pillé a él sólo y sabiendo de su valentía cuando no tiene compañía que lo ampare, me fui hacia él decidido, con la mirada del tigre en los ojos, una expresión casi agresiva y adoptando una postura chulesca le pregunté ¿a cuento de qué me había echado la bronca el otro día?.
Su respuesta fue que si bla, bla, bla... y sin más argumentos que más bla, bla, bla, llegó a darme la excusa de que estaba de mala uva porque había pillado a un ex empleado, haciéndole la competencia y al mismo tiempo cobrando el paro.
¡ME CAGO EN MI SANTA MADRE!..., ¿y por culpa de eso las pagas conmigo?.
Cabeza bajada y sin atreverse a mirarme a la cara me suelta como si tal cosa que por su parte el tema estaba olvidado. ¡Tócate los huevos!... me provoca una crisis de ansiedad que me hace ir a urgencias y ahora me sale con que por su parte el asunto está olvidado. Pues estará por la suya, porque lo que es por la mía, ni olvidado ni perdonado. Y como dice el refranero: "la venganza se sirve en plato frío", por lo que esperaré lo suficiente como para que enfrié lo que tenga que enfriar para luego desahogarme con él, por lo cual si el próximo sábado no follo, el lunes yo le monto un pollo de cojones a él y como se ponga tonto le doy por el culo, metafóricamente hablando, pues el tipo no es mi tipo aunque muchas veces me excita, y me excita tanto que tengo que contenerme para no tirarme a su yugular.
Más de mil veces me ha excitado, pero en lugar de darle por el culo lo que más me apetece es darle una somanta de hostias, por lo que ese balón y esa bota de fútbol de acero que adorna en su mesa sobre un pequeño pedestal de mármol, puedo penetrárselo por la boca si un día me excita más de la cuenta y pierdo la cabeza con el calenturón.
Cambiando de tema y dejando al astado de lado y junto a la teta, puedo decir y digo que por fin me he decidido a dar el paso de exponer parte de mis cuadros. Lo he hecho en la cafetería de enfrente de donde trabajo y aunque llevan allí sólo dos días, la dueña del establecimiento ya me comentó que le habían preguntado por ellos y que a la clientela les gustaban, eso sí, ni dios preguntó cuanto costaban, por lo que he de decir que los cuadros están allí, le adornan el local y la gente se fija en ellos, aunque de momento NI UN EURO.
Pero bueno, tarde o temprano todo se andará, que más tiempo se echó Bustamante encerrado en la academia de O.T. y mira a dónde ha llegado: no sé cuantos discos, una mujer preciosa, y un perro en la Nintendo que no le hace puto caso.
Y lo que canta a mi en particular no me gusta, pero todos recordaremos que en la academía no hacía otra cosa más que llorar, y como se dice por aquí: "o que non chora non mama".
Y si Bustamante llegó a donde llegó por qué no lo voy a conseguir yo, pues entre ambos tenemos bastantes cosas en común siendo la principal que ambos pertenecimos y pertenecemos al sector del ladrillo y que si él cantaba mientras levantaba un tabique, yo lo hago mientras me ducho y trabajando silbo, pues cantar me lo tienen terminantemente prohibido más que nada debido a que a mi voz le falta unos cuantos tonos para llegar al suyo, y eso que como le decían a él en la academia al eyacular se pierde tono de voz, lo cual desde mi punto de vista discuto, porque si algo tengo más que claro es que Bustamante, tanto por su edad y la esposa que tiene, por cojones tiene que follar más que yo.
Y siendo cierto eso de que al eyacular se pierde tono de voz, yo tendría que tener la voz de un ruiseñor.
De todos modos no tengo pensado dedicarme al cante más allá de la pileta de la ducha, ahora bien, espero que con esto de la pintura sacarle aunque sólo sea para tabaco. Y esto es urgente pues acabo de mirar el paquete y sólo me quedan tres cigarros.
Eso sí, la he dejado muy al lado por si en caso de necesidad tuviese que echarle de nuevo la boca, lo cual no sé si será más pronto o mas tarde, porque sólo llevo cuatro días currando y ya estoy estresado y decaído, no por el trabajo en sí, sino por el trato, el ambiente y el entorno. Y es que en la empresa en la que trabajo hay demasiados capitanes para un sólo grumete. Y no creo que haga falta decir quien es el grumete, pero lo diré por si alguien no lo sabe: soy yo. Y no sólo soy el grumete, sino que desde que tuve la desgracia de caer enfermo también soy la chacha, el atrapa broncas, el culpable de todos los males de la empresa, el responsable de la crisis mundial, etc, etc y etc. Por resumir diré que soy la puta para todo.
Tras la bronca de la semana pasada con el patrón y que como os conté me provocó una crisis de ansiedad que me obligó a ir a urgencias y por la cual el psiquiatra me recomendó seguir de baja, cargado de ánimos y echándole un par de huevos, decidí agarrar el toro por los cuernos y presentarme en el curro y de paso presentarle mis cojones al jefe, cosa que no hacía desde hace muchos años.
Es que si los patrones en este país ya son así de explotadores y rompehuevos, en esta tierra gallega son todavía peores, y en cuanto te ven hipotecado y cargado de responsabilidades familiares te aprietan y te estrujan hasta que te asoma el hígado por la boca, y si a esto le añadimos la puta crisis del carallo y la escasez de trabajo, ya no te quiero ni contar lo que se pueden pasar con uno, con la consiguiente diversión que encuentran puteando a la gente.
Pero con una pieza como yo se dio de frente el astado, que cuando me hundo me hundo del todo, pero cuando resurjo lo hago con fuerza, tomo la muleta con la derecha y el estoque con la izquierda y ¡ale toro!, ¡ale!... y cuando el bicho entra al trapo, unos cuantos muletazos, un par de banderillas, estocada y otro toro p'al Manolo.
En estos momentos me encuentro dándole unos pases de Verónica, más otros de pecho y preparándolo para el picador al cual enviaré tras un pase de rodillas.
Creo que tod@s conocéis o habréis oído alguna vez eso que los patrones suelen decir a sus curritos: "soy la mano que te da de comer". ¡Y una mierda!, pues yo desde que dejé la teta y la papilla, nadie me ha dado de comer de su mano y puedo asegurar sin temor a equivocarme de que como yo solo y con mi mano derecha por ser diestro y aunque agarre el cuchillo con la izquierda.
El plato de comida me lo gano con mi trabajo y puestos a discutir quién da a quien, yo le diría a muchos: ¿quién te ha dado el chalé con piscina y cancha de tenis, el Mercedes último modelo, los coches de tus hijos, viviendas para ellos, el sueldo de la chacha y las vacaciones en Canarias?. ¿Quién?, ¿quién te ha dado todo eso mientras tú te pasas medio día de tertulia en la cafetería?.
El pasado viernes y nada más incorporarme al puesto lo pillé a él sólo y sabiendo de su valentía cuando no tiene compañía que lo ampare, me fui hacia él decidido, con la mirada del tigre en los ojos, una expresión casi agresiva y adoptando una postura chulesca le pregunté ¿a cuento de qué me había echado la bronca el otro día?.
Su respuesta fue que si bla, bla, bla... y sin más argumentos que más bla, bla, bla, llegó a darme la excusa de que estaba de mala uva porque había pillado a un ex empleado, haciéndole la competencia y al mismo tiempo cobrando el paro.
¡ME CAGO EN MI SANTA MADRE!..., ¿y por culpa de eso las pagas conmigo?.
Cabeza bajada y sin atreverse a mirarme a la cara me suelta como si tal cosa que por su parte el tema estaba olvidado. ¡Tócate los huevos!... me provoca una crisis de ansiedad que me hace ir a urgencias y ahora me sale con que por su parte el asunto está olvidado. Pues estará por la suya, porque lo que es por la mía, ni olvidado ni perdonado. Y como dice el refranero: "la venganza se sirve en plato frío", por lo que esperaré lo suficiente como para que enfrié lo que tenga que enfriar para luego desahogarme con él, por lo cual si el próximo sábado no follo, el lunes yo le monto un pollo de cojones a él y como se ponga tonto le doy por el culo, metafóricamente hablando, pues el tipo no es mi tipo aunque muchas veces me excita, y me excita tanto que tengo que contenerme para no tirarme a su yugular.
Más de mil veces me ha excitado, pero en lugar de darle por el culo lo que más me apetece es darle una somanta de hostias, por lo que ese balón y esa bota de fútbol de acero que adorna en su mesa sobre un pequeño pedestal de mármol, puedo penetrárselo por la boca si un día me excita más de la cuenta y pierdo la cabeza con el calenturón.
Cambiando de tema y dejando al astado de lado y junto a la teta, puedo decir y digo que por fin me he decidido a dar el paso de exponer parte de mis cuadros. Lo he hecho en la cafetería de enfrente de donde trabajo y aunque llevan allí sólo dos días, la dueña del establecimiento ya me comentó que le habían preguntado por ellos y que a la clientela les gustaban, eso sí, ni dios preguntó cuanto costaban, por lo que he de decir que los cuadros están allí, le adornan el local y la gente se fija en ellos, aunque de momento NI UN EURO.
Pero bueno, tarde o temprano todo se andará, que más tiempo se echó Bustamante encerrado en la academia de O.T. y mira a dónde ha llegado: no sé cuantos discos, una mujer preciosa, y un perro en la Nintendo que no le hace puto caso.
Y lo que canta a mi en particular no me gusta, pero todos recordaremos que en la academía no hacía otra cosa más que llorar, y como se dice por aquí: "o que non chora non mama".
Y si Bustamante llegó a donde llegó por qué no lo voy a conseguir yo, pues entre ambos tenemos bastantes cosas en común siendo la principal que ambos pertenecimos y pertenecemos al sector del ladrillo y que si él cantaba mientras levantaba un tabique, yo lo hago mientras me ducho y trabajando silbo, pues cantar me lo tienen terminantemente prohibido más que nada debido a que a mi voz le falta unos cuantos tonos para llegar al suyo, y eso que como le decían a él en la academia al eyacular se pierde tono de voz, lo cual desde mi punto de vista discuto, porque si algo tengo más que claro es que Bustamante, tanto por su edad y la esposa que tiene, por cojones tiene que follar más que yo.
Y siendo cierto eso de que al eyacular se pierde tono de voz, yo tendría que tener la voz de un ruiseñor.
De todos modos no tengo pensado dedicarme al cante más allá de la pileta de la ducha, ahora bien, espero que con esto de la pintura sacarle aunque sólo sea para tabaco. Y esto es urgente pues acabo de mirar el paquete y sólo me quedan tres cigarros.
1 han comentado:
Ja,ja,ja vas a tener que inventar los cuadros musicales, ya verás como alguno compran. ;-))
Un abrazo.
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