martes, 30 de septiembre de 2008

Nada

Hoy no tengo muchas ganas de escribir aparte de que estoy agotado físicamente. Hace 15 años practicaba natación y la semana pasada he comenzado a practicarla de nuevo. Hoy ha sido el tercer día y dado que los otros dos me había encontrado bastante bien, nadé como si me estuviese persiguiendo un cocodrilo. Y claro, ahora no puedo ni con las orejas, y lo jodido es que éstas tienen que sujetarme las gafas.
Este año me he propuesto recuperar la cintura esbelta que no hace mucho tenía y sin dejar de comer galletas de chocolate, mi vicio y mi perdición.
Porque aquí, debajo de esta capa de grasa que tengo en la barriga, sé que hay unos músculos abdominales y arrediós que los saco para fuera. Se me ha metido entre oreja y oreja y cuando a mí se me mete algo por ahí, no paro hasta que lo consigo.
Así que me he puesto el bañador, el gorrito y las gafas y me he tirado a la piscina… y casi me tiene que sacar el socorrista el primer día. Sí, bueno, es que entré a lo campeón y nadé, nadé y nadé hasta que nada, pillándome ese nada en medio de la piscina.
Tuve que improvisar y a mi edad y después de haber hecho dos largos a crol con un estilo perfecto, acabar los últimos metros nadando como un perrito, tragando agua y tosiendo, fue toda una vergüenza, pero en ese momento me hubiese agarrado a un flotador de patito si lo tuviese a mano.
Lo que todavía no me explico es que siendo municipal la piscina y teniendo socorrista, cómo éste no se tiró a por mí.
En fin, ya sé que todo esto que acabo de decir no os importa, pero tenía ganas de hablar y ya que mi mujer se quedó dormida en el sofá viendo CSI, me dije… escríbelo y así haces una entrada. Y dicho y hecho.

domingo, 28 de septiembre de 2008

¿Existe el punto G?

El otro día en “Cuéntame”, serie que recrea a la perfección lo que fueron los últimos años de la dictadura y los primeros de la transición, tocaron un punto que también llegó con la caída del régimen y del que hoy por casualidad me he acordado, hablo del “punto G”.
A decir verdad el “punto G” ya andaba por aquí antes de que cayese el régimen, lo que sucedía es que nadie se atrevía a buscarlo porque esas cosas estaban muy mal vistas.
En el único sitio que se podía buscar era en casa, aunque por aquel entonces las mujeres dejaban buscar lo que fuese, siempre y cuando fuese con la luz apagada y las bragas puestas.
Oí hablar del “punto G” por primera vez cuando aun no sabía como era el conjunto, lo que aumentó más aún mi curiosidad por conocerlo. Y por si surgía el acontecimiento siempre llevaba encima un crokis que había copiado de una revista de la época.
Tal y como lo tenía copiado era imposible perderme. La putada fue que perdí el plano y debe ser por eso que lo busco y lo busco y no lo encentro, encuentro otros, pero ese precisamente no.
Dicen que fue descubierto por un médico, un tal doctor Gräfenberg, y sólo por ese hecho el descubrimiento adquiere carácter científico, ahora bien, no dicen como lo descubrió y eso sería muy importante.
Porque, ¿con quién lo descubrió?, ¿con su mujer?, ¿con la enfermera?, ¿con una paciente?,¿o con una rata de laboratorio?... y otra cosa muy importante, ¿sufragó el gobierno o cualquier otro organismo el estudio científico que llevó a su descubrimiento?... hablando en plata ¿quién pagó el polvo?.
¿Y cómo lo dio a conocer al resto de científicos y al público?.
–"Señores, acabo de descubrir un punto en el coño de la mujer que si lo tocas hace que se estremezca de placer"-.
Y apuesto a que los demás científicos se miraron unos a otros preguntándose ¿en qué coño dice éste?... y claro, a continuación supongo que querrían contrastar las palabras del descubridor, ¿les prestaría la señora a todos?...
Por mucho que lo diga la Wikipedia, yo soy demasiado mal pensado como para creerme que ese punto estaba ahí esperando a que ese doctor lo descubriese, lo que pasa que el mundo funciona así y a un orgasmo con la bata blanca puesta mira la importancia que le dan.
Es como si ahora uno finge un orgasmo cuando el urólogo le hace un tacto rectal y a éste le da por decir que ha descubierto el “punto G” de los hombres. Vamos, que yo creo que el doctor que lo descubrió, ese día tuvo una buena actuación y punto.

viernes, 26 de septiembre de 2008

Aprende a recurrir una multa

Reproduzco una carta enviada a un Juez para recurrir una multa, y la verdad, no sé si es cierta o una mentira más de las que circulan por la red. En todo caso y de ser ciertos los datos que da, esta podría servirte como plantilla para un recurso si algún día te cazan por exceso de velocidad.
__________

Estimado Sr. Juez:

He sido denunciado por circular a 250 km/h en la Nacional 530 cuando iba camino de mi pueblo para hacer la matanza.
Según me dijeron los Guardia Civiles que me pararon, el radar me detectó a la velocidad antes indicada en un tramo limitado a 70 km/h.
Yo, por mi parte, puedo decir que he visto perfectamente esa señal con el número 70 en negro, dentro del círculo rojo con el fondo blanco. Sin embargo, por más que me he fijado, ne he visto ninguna unidad de medida junto al numero 70.
Como Vd. Sabrá mejor que yo, que para eso ha estudiado derecho, la Ley 54/1893 establece que en el Estado Español (que Dios guarde muchos años) se establece que el Sistema Métrico Internacional será obligatorio en el País, y dentro de las reglas propiamente dichas del citado Sistema Métrico Internacional, se establece que la unidad de longitud será el metro, y la unidad de tiempo será el segundo.
No sé si cuando Vd. terminó derecho le dio tiempo a hacer algo de matemáticas, pero por si acaso voy a informarle de que la velocidad se mide dividiendo la distancia recorrida entre el tiempo empleado en recorrerla, por lo que cogiendo la unidad de medida de la distancia (metro) y la unidad de medida del tiempo (segundo), obtendremos la unidad de medida de la velocidad:

METROS POR SEGUNDO, que tal como nos dice la Ley anteriormente citada, SERÁ LA UNIDAD DE MEDIDA OBLIGATORIA PARA LA VELOCIDAD.

Yo no le voy a negar que fuese a 250 km/h, que de hecho los iba, pero es que la señal que yo vi sólo ponía 70, y en virtud del imperio de la ley que todos debemos respetar y del que Vd. es el máximo exponente, no he dudado en considerar que el 70 se refería a la unidad internacional de la velocidad, el metro por segundo; si Vd. hace la conversión, observará que 70 m/s equivalen a 252 km/h, con lo cual yo circulaba a 2 km/h por debajo de lo permitido.
Por todo lo expuesto, ruego a Vd. que me devuelva el carné de conducir, los 600 euros y los 8 puntos que me han quitado, que no están las cosas para bromas, dejando este asunto en un lamentable malentendido por el que no voy a denunciar a los pobres Agentes, que bastante tienen con su arriesgado trabajo y estoy seguro que no lo hicieron con mala intención.


Atentamente

jueves, 25 de septiembre de 2008

Dos líneas

Distinguidos lectores, queridísimas lectoras, os escribo estás dos líneas mientras me fumo el último cigarrillo antes de irme para cama, para deciros entre otras cosas que el día se ha acabado y que mañana vendrá otro.
Como podéis ver la cabecera del blog cada día se parece más a la puerta de un retrete de bar de mala muerte, al menos a la puerta del wc de caballeros por la cara de dentro, no sé si en el de las damas pasa igual porque jamás he entrado.
Y Dios me libre de hacerlo porque si me pillan con ella en la mano me puede caer el pelo.
Es probable que tú que me lees veas escrito tu nombre en ella, es mi forma de agradeceros el que os paséis por aquí, me leáis y me dejéis comentarios y todas esas cosas que me decís en ellos. Así también me evito el tener que estar dándoos las gracias continuamente.
Yo creo que no se me olvida ningun@, si, ya sé que de ti… pero coño… ¡por un par de comentarios!…
Si a algun@ de los que os he puesto el nombre no quiere aparecer en tan embadurnado lugar, que me lo diga y lo tacho con una equis grande, porque ahora borrarlo de todo me da mucho trabajo.
Nada más, lo prometido es deuda, así que he dicho que escribiría mientras fumaba y aquí se acaba la entrada y el cigarrillo.
Hasta mañana.

miércoles, 24 de septiembre de 2008

Recurso artístico

La carta que reproduzco a continuación es la respuesta de un ciudadano que habiendo solicitado un uso privativo de agua, no obtuvo noticias del organismo (in)competente hasta 17 años después de su solicitud, siendo ésta únicamente para requerirle una fotocopia del DNI/CIF, para proseguir con la tramitación de la misma.
La carta en cuestión tiene el correspondiente sello de entrada en la CONFEDERACION HIDROGRAFICA DEL GUADALQUIVIR, en SEVILLA, (fecha 13 de julio de 2.007 y nº entrada 41/20766) y no tiene desperdicio.
_____________

Expte. B2145/1991-INN
Confederación Hidrográfica del Guadalquivir
Comisaría de Aguas (Mº de Medio Ambiente)

D. Francisco Javier Cartagena Medina, mayor de edad, con domicilio en Alicante, calle Sándalo nº 4 (03559) y NIF nº 21325696-G

E X P O N E

I - Que en fecha 25 de abril de 2007, he recibido requerimiento de ese Organismo, en relación con una petición de uso privativo de agua, efectuada por esta parte el 20 de agosto de 1990 (se acompaña fotocopia). Se me requiere para que facilite fotocopia de DNI/CIF, de otros propietarios de la finca "si los hubiere, que no figuren en la relación de propietarios" de la instancia presentada en su día.

II- Que transcurrido el "brevísimo" espacio de tiempo de 17 años entre la petición efectuada y la primera contestación recibida por ese Organismo, procedo a efectuar las siguientes

M A N I F E S T A C I O N E S

Primera: Felicitarme (a mi mismo) de estar todavía vivo después de 17 años y no precisamente por las propiedades curativas del agua objeto de mi solicitud.

Segunda: Solicitar de ese Organismo con carácter previo a proseguir la tramitación, me remita la siguiente información:
  • Si el acuífero sigue en el mismo sitio, o con el paso del tiempo ha emigrado.
  • Caso de seguir en el mismo o similar sitio, si el acuífero se ha reproducido, y, en ese caso, cuántos vástagos tiene, especificando si el agua tiene alguna propiedad adicional, dado el extraordinario celo mostrado por ese Organismo en su custodia (v.g. si es agua bendita o no).
  • La legislación que se ha aplicado hasta ahora (v.g. Tanzania, si es que hubiera acuerdo bilateral en materia de aguas).
  • Para el caso de que fuese masoquista y quisiera proseguir la tramitación, se me informe la previsión de duración del siguiente trámite (lo del procedimiento completo entendemos que sería pedir demasiado), y ello por si me conviene efectuar, desde ya, una cesión de petición a favor de mi nieto más joven.
Tercera: Felicitar al funcionario, o incluso a los múltiples funcionarios que han podido participar en el único trámite realizado, por la extenuación que les ha debido producir pensar durante 17 años en pedir la fotocopia de un DNI. Sin duda, semejante esfuerzo es para pedir baja por motivos de salud o quien sabe si el alta en el récord de los Guiness.

Cuarta: Felicitarles, así mismo, por la extraordinaria tranquilidad "torera" que han sabido mostrar (lo que no es nada fácil), para enviarme tan complejo requerimiento después de 17 años. Ciertamente indica una autoestima muy elevada, una seguridad envidiable (un "aquí no pasa nada") y pone de manifiesto, en última instancia, que las aguas del Guadalquivir están perfectamente custodiadas por ese Organismo.

En virtud de lo expuesto,

SE SOLICITA de ese Organismo tome en consideración la procedencia de archivar, con calma (despacito y buena letra), la petición efectuada, pidiendo esta parte humildes disculpas por el enorme esfuerzo realizado por los funcionarios al cargo de su tramitación, rogando al Instructor reparta las felicitaciones, todo lo efusivas que pueda, a los funcionarios participantes, incluso a los que se hubieran jubilado (condecoraciones incluidas).

En Alicante para Sevilla a 12 de julio de 2.007

............................Fdo: Francisco Javier Cartagena Medina

___________

Nota: Se desconoce la fuente que ha "filtrado" la carta, pero se sospecha... (Ay Maleni, Maleni...)


lunes, 22 de septiembre de 2008

Duelo en Kansas City

No tenía ningún caso pendiente de resolver, por lo que aquella lluviosa tarde de domingo decidí quedarme en casa para descansar. En un momento cogí el álbum de fotos familiar y me dispuse a mirarlo.
La primera foto es la de mi tatarabuelo, Don Vicent, sheriff de Kansas City, de quien sus proezas fueron conocidas desde el más lejano oeste hasta el más cercano este, desde las praderas de Texas y las montañas de Arizona, hasta los escarpados Cañones del Colorado.
Pero de todas sus hazañas, la más popular es sin duda cuando acabó con las fechorías de Jhonny, al que apodaban “el tuerto” desde que había perdido una oreja en un duelo.
La legendaria historia de cómo mi tatarabuelo había dado caza al malhechor, fue transmitida de padres a hijos de generación en generación en forma de legado familiar, siendo a la postre el principal motivo por el cual nuestra familia esté formada por una saga de valientes e intrépidos agentes de la Ley y el Orden.
Me la habían relatado tantas y tantas veces que me la conocía como si la hubiese vivido yo mismo.
Aquella tarde y viendo la foto de mi antecesor, la recordé de nuevo…….

(Fija tu mirada en el centro de la espiral y deja que te transporte en el tiempo…)


(para dearle mayor realismo al relato, sería muy importante que lo que leas a continuación te lo imagines en blanco y negro).

KANSAS CITY, año 1.842...


Ocurrió una tarde lluviosa de domingo. Un jinete detuvo su caballo a la puerta del saloon, lentamente se apeó dejando al animal atado a la puerta del local. En ese mismo instante y al otro lado de la calle, un hombre que se percató de su llegada montó rápidamente en su caballo gris claro y se alejó de allí al galope tocoto, tocoto, tocoto, tocoto, tocoto, tocoto, tocoto, tocoto, tocoto, tocoto….
Al cabo de unos instantes y por el mismo lugar que este se había alejado, otro jinete se acercó también al galope y sobre su caballo, (sobre el suyo, no sobre el del otro), un elegante corcel gris igual al anterior pero un poco más oscuro.
Tocoto, tocoto, tocoto, tocoto, tocoto, tocoto, tocoto, tocoto, tocoto, tocoto…. ihihihihi, relinchó el caballo cuando el jinete le clavó las espuelas en sus partes para detenerlo.
El sheriff Vicent bajó de su montura, posó su mano sobre el revolver y se dispuso a entrar en el saloon. Traspasó las pequeñas puertas abatibles tras las que se detuvo para desde allí echar una ojeada al interior.
Del bullicio y la algarabía del saloon se pasó al más inquietante de los silencios. Tanto los clientes que jugaban al poker y las máquinas tragaperras como los que bebían en la barra, se hicieron a un lado dejando un pasillo vacío entre mi tatarabuelo y el forajido.
Sólo Sam “el borrachín” se quedó en su sitio, apoyado en la barra y ajeno a lo que pasaba. Al cabo de unos segundos se volvió estremeciéndose de terror al ver la figura del sheriff apostado en la puerta.
-¡demonios!- masculló –un control de alcoholemia y yo con esta mierda...-
Dio un salto y se escondió tras la barra donde también se ocultaba Joe, al que apodaban “el barman” precisamente por ser el barman del saloon.
Mi tatarabuelo se acercó un poco más hasta “el tuerto”, que seguía inamovible en su sitio y sin haberse dado la vuelta.
Se situó un par de metros a su espalda y transmitió un saludo que más bien pareció una amenaza.
-No has debido cruzar el Missisipi, Jhonny-.
Jhonny se volvió y se encaró a mi tatarabuelo.
-vaya, vaya… a quién tenemos aquí, nada más y nada menos que al sheriff Vicent, jajaja...-
-tengo que arrestarte Jhonny-.

-¿cómo dice sheriff?-, preguntó con arrogancia “el tuerto”.
Mi tatarabuelo dio dos pasos a su izquierda, situándose del mismo lado en el que Jhonny tenía la oreja y le repitió el mensaje.
-lo he escuchado a la primera sheriff… tengo sólo una oreja pero muy buen oído. No le será tan fácil ponerme la soga al cuello, así que tendrá que sacarme de aquí a la fuerza-. Jhonny bajó léntamene su mano hasta ponerla a la altura de su revolver, lista para desenfundar.
-no hagas una tontería Jhonny, y acompañame-.
-¿de verdad piensa que me voy a ir con usted para que me ahorque sheriff?...-
-te aseguro Jhonny que no será así. Te doy mi palabra de sheriff de Kansas de que antes serás sometido a un juicio justo... y después te ahorcaremos-.
El silencio era tan denso que se podía cortar. Pero éste se rompió al irrumpir en el saloon Jonas "el enterrador", al que con cinta métrica en la mano y desde la puerta se le escuchó decir:
–me han dicho que tengo trabajo… glups-, y tragó saliva al comprobar que se había precipitado y que los muertos aún estaban vivos.
El ruido de un vaso al estrellarse contra el suelo llamó la atención de todos. Tanto Jhonny como mi tatarabuelo lanzaron una rápida mirada hacia donde procedía el ruido. “El tuerto” hizo un leve movimiento, mi tatarabuelo desenfundó con una rapidez endiablada y de un certero disparó alcanzaó a Jhonny, que cayó desplomado.
Se acercó hasta él y antes de morir lo escuchó decir con la voz entrecortada:
-¿por qué me… has dispa…rado hi…jo de puta… si sólo iba a… quitar dinero… para… pagar el wisky?… aggg…-.
Y tras decir esto un hilo de sangre brotó de su boca, muriéndose a continuación con ella abierta.


(Ahora ya puedes imaginártelo en color porque volvemos al tiempo actual)
La melodía de los pajaritos de mi teléfono móvil me devolvió a la realidad. Descolgué y el comisario me puso en conocimiento de un nuevo caso.
Para los criminales no hay días festivos, pero para los defensores de la Ley tampoco y allá donde haya que capturar a un delincuente… presto va el Teniente Vicente.
_____

Nota del autor:
Este relato se presenta para la III edición del Concurso Escribe Tu Historia, promovido desde el mosquitero. Por no haber nada escrito que lo prohiba, el relato cuenta con efectos especiales, si algún impedimento hubiese por ello, avisadme que se los quito.

domingo, 21 de septiembre de 2008

¿Nos hacemos una paja?...

Curso escolar 1.972-1.973, Colegio de San Jerónimo, 7º curso de E.G.B., un día cualquiera en clase de religión.
D. Salvador se dirigía sudoroso a sus alumnos quienes se las hacíamos pasar canutas con nuestras incómodas preguntas, todas ellas relacionadas con los actos impuros que hacían pecar contra el sexto mandamiento.
-sobarse los genitales o masturbarse, aparte de ser pecado, es una porquería que te puede acarrear graves problemas con la vista, e incluso la ceguera-.
Y las miradas de todos los alumnos se volvieron hacia Villaverdeera el único que tenía gafas, y además de las de culo de botella.
Una mano se alzó pidiendo permiso para hablar
-¿qué quieres Giadás?-.
-¿y qué es masturbarse?- preguntó el simpático de la clase.
Una buena pregunta y de la que todos teníamos una idea más o menos aproximada de por donde iba la respuesta.
La voz aflautada de Rilo se escuchó desde la última fila de pupitres –es hacerse una paja, imbécil-. Y los 35 alumnos estallamos en una sonora carcajada.
D. Salvador puso orden en la clase y la dio por concluida cuando sonó el timbre, dejando sin responder la pregunta de Giadás, y al resto con la duda.
Fuera del aula, cinco o seis alumnos hicimos corro alrededor de Villaverde, que aparte de repetir curso llevaba gafas, así que nadie mejor que él para sacarnos de la duda.
-¿cómo se hace una paja, Villaverde?-.
-sacudiéndote la picha-.
-¡ostras!, pues yo me la sacudo siempre después de mear
- dijo Otero.
-¡toma!, como todos… hasta tres sacudidas es lo normal, pero si la sacudes más de tres ya es una paja-.
-pues mi primo el mayor dice que para ser paja te la tienes que sacudir por lo menos una docena de veces. Y tiene 16 años, por eso lo sabe
-, apuntó García, que por ser el listo y el chapón de la clase su razonamiento adquiría el valor de una lección.
-¿tú primo tiene gafas?-, preguntó Martínez.
-no-.
-pues Villaverde sí y mira que cristales más gordos, así que si Villaverde dice que es a partir de tres, es a partir de tres-,
lo dijo Seoane, y como era el macarrilla de la clase, su razonamiento fue incuestionable y la reunión se dio por concluida.
Caminaba para casa en compañía de Casal cuando a éste le entró una repentina gana de mear. Se apartó del camino, se puso frente a un muro y me llamó.
-¡eh, Losada!... ¿y si nos hacemos una paja?...-
-vale- respondí sin dudarlo y me puse a su lado.
Cuando la última gota de orina salió de su miembrillo, comenzó a sacudírsela sin piedad y luego estar un rato haciéndolo se vuelve a dirigir a mi.
-no sé tío, empiezo a pensar que ni Villaverde ni el primo de García saben lo que es una paja, porque debo llevar unas 30 sacudidas y aun no le pillo el gusto… ¿y tú que tal?-.
-yo aún no empecé porque no me da salido el meo-.
Casal dejó lo que se traía entre manos volviéndose hacia mí con una cara entre incrédulo y asombrado, me dijo algo y fue la segunda cosa relacionada con el sexo que aprendí ese mismo día.
-¡ostras tío, eres impotente!...-

_____


Nota:
Los oftalmólogos aseguran que el uso de gafas no tiene nada que ver con la masturbación.

sábado, 20 de septiembre de 2008

El caso del camisoncito transparente

Ummm, que body tan sexy, y con esas medias… y fíjate en aquel camisoncito que cortito y transparente… me pregunto como le quedará a mi mujer… ummm. A ver si desde aquí puedo verles el precio…
Fueron unos segundos en los que mi astuta mente investigadora se distrajo de su tarea, pero pronto la alarma que todo buen policía lleva permanentemente activada en la mente se disparó y tras un profundo suspiro volví a clavar mi vista en la ventana del segundo piso, justo encima del escaparate de la lencería.
Agazapado en el Ford Escort vigilaba desde hacía más de 10 horas el domicilio de un peligroso psicópata. 10 horas al acecho como un perro de presa, ajeno a todo lo que ocurría a mi alrededor, con la mirada clavada en la ventana a la espera de que la luz se encendiese en ella, señal de que había llegado y así poder echarle el guante.
De cuando en cuando bajaba la vista hasta el escaparate para que no se me agarrotasen los músculos del cuello, y cada vez que ésta se fijaba en el camisoncito, mi pensamiento se iba para otra cosa dejando de lado el caso.
Vigilar a un peligroso delincuente como yo lo estaba haciendo no es tarea fácil. Bajo ningún pretexto puedes abandonar el puesto de observación o bajar la guardia. Para hacerlo se requiere mucha paciencia y sobre todo habilidad y templanza.
De no ser por estas dos últimas virtudes hubiese meado fuera de la lata de cerveza que tras beber me había reservado para una emergencia como esa. Soy perro viejo y como me dicen en la brigada, “el McGiver del cuerpo”.
Tanto tiempo sin moverme del sitio era el motivo de que no hubiese probado alimento por lo cual y ante la situación de aparente calma hice algo que hasta la fecha jamás había hecho: llamar a casa para que me acercasen un bocadillo.
30 minutos después de la llamada, dobló la esquina una figura de la que su andar tambaleante me resultó conocido. Vestida con una gabardina y gafas de sol, hubiese pasado desapercibida de no ser que aquella era una calurosa noche de verano y también por las zapatillas.
-¿pero usted de qué va doña Engracia?-.
-de incógnito, yerno- me respondió por lo bajo mirando disimuladamente hacia otro lado .-¡la madre que la parió!-...
Ser policía y tener una suegra aficionada a las novelas detectivescas y policíacas y enganchada a “Los hombres de Paco”, tiene aparte de estos inconvenientes alguno peor.
-¿qué me trae de cena?-.
-un poco de guiso que sobró del mediodía-.
-pues traiga p’aca que me muero de hambre-.
-cómo que traiga p’aca… la contraseña…-.
Yo estaba demasiado hambriento como para ponerme con jueguecitos con ella, así que en un tono subido pero en bajo le exigí que me diese la tartera.
-no me toque los cojones doña Engracia, y traiga p’aca la tartera o usted y yo la vamos a tener-.
-si no me dices la contraseña, no hay cena-.
Quise arrebatarle la tartera de la mano, lo que ella trató de evitar separándola de mi con un movimiento brusco, dándole en la cara a la única persona que en esos momentos caminaba por la calle. Mala suerte.
El impacto fue tan brutal que el hombre cayó desplomado.
Me acerqué para socorrerlo y… rápidamente busqué mi cartera en el bolsillo de la americana, la abrí y de un compartimento saqué las fotos de mi esposa, la foto de cada uno de mis cinco hijos y… la de ese hombre. Buena suerte.
Sin perder ni un instante le puse las esposas, luego paré un taxi en el que envié a mi suegra para casa y a continuación llamé al comisario para comunicarle que había detenido y reducido al psicópata que vigilaba.
A los pocos minutos el sonido de las sirenas de dos coches patrulla rompió el silencio de la noche.
De uno de ellos bajó el Comisario, se acercó hasta el hombre que yo había detenido y tras observarlo se dirigió a mi –es él, no hay duda. Buen trabajo Vicente-.
–A sus órdenes comisario-.
En un abrir y cerrar de ojos los agentes metieron al delincuente en el coche y se fueron todos por donde habían venido dejándome a mi sólo en la calle.
Eché un vistazo al guiso esparcido por el suelo –ummm… que buena pinta tenía-. Encendí un Ducados y antes de ir hacia el coche me acerqué hasta el escaparate de la lencería.
Lo observé durante un rato tras el que saqué mi agenda del bolsillo e hice una anotación para el día siguiente: “comprar camisoncito transparente, 72 euros”.

Curso de inglés en unas cuantas entradas (II)

Distinguidos lectores, queridísimas lectoras, esta entrada estará dedicada a dar la segunda lección del curso de inglés en dos entradas que puese en marcha en el blog no recuerdo cuando.
En aquella primera lección puse en marcha un novedoso sistema de aprender un idioma, el cual cosiste en escribir un texto en uno e intercalando palabras de otro.
He utilizado en aquella lección unas cuantas palabras en inglés dentro de un texto en español y me había comprometido a hacer esta segunda lección utilizando el resto de las palabras, pero he recapacitado sobre el tema y he llegado a la conclusión de que para llevar a cabo este propósito tendría que hacer una entrada demasiado extensa, la cual seguramente se haría muy pesada e imcomprensible para todo aquel con un nivel de inglés más bajo que el mío.
Por lo tanto me veo en la necesidad de ampliar el curso unas cuantas entradas más, bien hasta que yo me aburra o hasta que tú me mandes a freir puñetas.
Así que coge papel y lápiz que la segunda lección comienza a partir de ya.
.
Ya
LESSON 2 ó SEGUNDA LECCIÓN:

Antes de yesterday veía por the televeixon one program in the que discutían por unas declaraciones hechas by one tal Revilla, que es the President of Cantabria, en las que decía que había fokinfokin por first vez a los 18 years, in one honky tonk woman puticlub and pagando.
And la que se ha montado no tiene precedentes, aunque debería. Me remember aquel caso de one politican de cuyo name ahora no remember, que se fue de picos pardos a the Rasputín honky tonk woman puticlub, donde one pilingui le hizo one servicio para satisfacerle the vicio.
The polvo lo pagamos everybody and no remember haber visto a Pilar Rahola make ona fiera como the other day. Desde mi de vista point, no me parece justo que Revilla tenga que pagar by second vez by the mismo polvo, ya que pienso que si no hubo embaraceixon the polvo ha prescrito.
By otra part, the crisis sigue in su ascendiente línea de descenso, because como ya tenemos a quien echarle the culpa, everybody happy and contentos. Because Zapatero ha dicho bla bla bla, Solbes también bla bla bla and Rajoy mucho grr grr grr, because a the hour de the verdad ni pio. And de seguir este rumbo, everybody acabaremos with the water al cuello y diciendo glu glu glu.
Hay que destacar que esta pasada semana ha comenzado the escolar curse, o lo que es lo mismo, acaban the hollydays the teachers y comienzan las de the padres, because da un gustazo mandarlos para cama a the ten o'clock en punto. Que peace hay in the house cuando the childrens duermen.
And para acabar, la semana que viene sabremos por end if the world se acaba por culpa del cientific experiment, de todos modos, if no se acaba de esta se acabará other day, because he leído a Josete el del baúl y según parece, en el year 2.036 caerá one granizo que puede mandar todo a la mierdeixon.
Only será one granizo, ni siquiera granizada, pero no te servirá el parawater because aunque only es one, pesa no sé cuantas toneladas.


Ahora para finalizar, voy a conjugar uno de los verbos utilizados en este escrito. Os aconsejo que lo estudiéis en vuestras casas y lo aprendáis bien, teniendo muy en cuenta la pronunciación.
Presente del verbo remembrar.
Yo remember
remember
él remember
nosotros remember
vosotros remember
ellos remember.

One de estos days, doy la tercera lesson.

Goodbye.

viernes, 19 de septiembre de 2008

Se busca publicista

Hoy, a pocos días de que el verano deje paso al otoño, me he comprado un polo blanco que me sienta de maravilla aparte de que resalta más el poco moreno que me queda.
Un Lacoste con su cocodrilo y todo, a muy buen precio, 7 euros. Y lo mejor de todo es que ni me he molestado en ir a comprarlo ya que me lo vendió un moro en el bar mientras tomaba café.
Que barato es ser pijo. Porque ese polo da el pego por auténtico, al menos el cocodrilo sí lo es, verde y con el rabo doblado como los genuinos.
Conste que a mi lo de las marcas me trae sin cuidado, no soy de esos que cuando compran miran la marca, que si Adolfo Domínguez, Victorio & Luchino, Perry Meison o Ausonia.
Yo con ropa de mercadillo o del top manta voy vestido. A fin de cuentas los guapos no tenemos ni siquiera porque peinarnos, y tampoco vamos a estar más feos por llevar unos calcetines cualquiera en vez de unos Punto Blanco.
Es que eso de pagar de más simplemente por una marca a mí me toca un poco los cataplines, vale sí, la ropa sienta bien pero… ¿tú crees que unos calzoncillos Kelvin Clain van hacer que tú nariz parezca más pequeña?… en mi caso sí porque ya la tengo pequeña, pero ¿y la tuya?...
Aún el otro día sin ir más lejos, me dijeron lo que costaban unos Manolos y flipé, y cuando me dijeron que era una marca de zapatos casi me da un telele. Coño con mi tocayo que bien se lo ha montado.
¡Unos zapatos de 3.000 euros!... no me veo metiendo tanto dinero en unos zapatos aunque la Seguridad Social me pagase una parte... y menos aún si son tacones.
¡Jo!, la verdad es que debería sentirme orgulloso del éxito de mi tocayo y sobre todo de que haya puesto mi nombre a una moda. Un Manolo zapatero, y no un zapatero remendón cualquiera, si no que el mejor de los zapateros.
Y por mucho que un zapatero remendón cualquiera haya llegado a La Moncloa, no tiene ni punto de comparación con mi tocayo, porque 3.000 eurazos valen unos zapatos, mientras que zapatero vale poco más de un euro... o puede que valga más, pero si él no sabe lo que cuesta un café, ¿por qué tengo yo que saber lo que vale él?... eso sí, sale mucho más caro que los zapatos.
¡Ahhh!, pero es que hasta en eso pagamos la marca… y yo me lo imaginé la primera vez que vi lo de ZP. Ya están los publicistas metiéndonos una de las suyas, fue lo que pensé… Y mira si no, primero nos metieron la ZP hasta en la sopa y luego nos la metieron por el culo. En este caso y como en otros tantos la marca supera al producto, porque jodidos estamos todos pero sólo se corre Zerolo.
Y ahora que lo pienso, si un Manolo se ha convertido en el rey de los zapateros, ¿por qué otro Manolo no puede convertirse en presidente del gobierno?... ¿y por qué ese Manolo no puedo ser yo?...
No sé, no sé… pues ahora que lo pienso, casi que me lo voy a pensar. Tendría que empezar por crear mi propia marca y deshacerme del Lacoste que compré esta mañana, más que nada por si me asocian con la competencia.
Que pena... con lo bien que me quedaba...


Todos estos zapatos, sean de la talla que sean, se llaman como yo.

jueves, 18 de septiembre de 2008

Carta a mi esposa

Queridísima Churry:
,
Soy yo, tu esposo, el único que te llama así al menos que yo sepa. Te escribo esta carta porque cuando esta mañana tomaba el café, me llamó la atención algo que escuché en un programa de la tele en el que hablaban de las parejas y los divorcios.
¿Sabes qué decían, churry?, que de cada cuatro parejas que se casan, tres acaban divorciándose. Y nosotros como tontos presumiento de ser una pareja moderna… ¡y una mierda!.
Si de verdad lo fuésemos, tú estarías viviendo en casa con los niños y yo no sé, porque según creo el Gobierno no concede ayudas para el alquiler a los jóvenes de mi edad, por lo que seguramente tendría que irme para casa de mi vieja y compartir alfombra con el perro.
Ya sabes que mi madre se deshizo de mi dormitorio el mismo día que contragimos matrimonio. Siempre me pregunté a qué venían tantas prisas y hoy sin querer me he enterado… ella conocía estas estadísticas y tirando la que hasta entonces era mi cama, se aseguraba de que salía y al mismo tiempo que allí ya no volvía.
Mi madre, que me conoce como si me hubiese parido, sabe que soy buen entendedor y que con este gesto captaría su intención. Pero la inocente no tuvo en cuenta que yo me entiendo muy bien con el perro precisamente por eso, porque yo soy buen entendedor y él poco ladrador.
Pero no es del perro de quien te quiero hablar, si no de lo nuestro. Es cierto que me va muy bien y que no me quejo, pero coño ¿por qué tenemos que ser siempre nosotros los que nademos contra corriente?.
De nuestras parejas y matrimonios amigos, poco a poco van cayendo, y de los de llevar tanto tiempo juntos sólo quedamos nosotros. Mientras ellos se van modernizando, nosotros nos quedamos obsoletos.
Ese es uno de los motivos por los cuales te escribo esta carta, porque nos estamos rezagando y los demás nos están aventajando. Y yo sé que a ti te gusta eso de estar a la última, me refiero a la última en modas, no a lo de ser la última de la fila.
Otro de los motivos es para avisarte que esta noche quedé con un amigo al que hace mucho que no veo y que por lo tanto llegaré un poco tarde a casa.
Por supuesto que no tienes que esperarme despierta, pero si tienes pensado hacerlo, hazte la dormida en cuanto me oigas abrir la puerta pues como te pille despierta ya sabes a que te arriesgas.
Si por el contrario quieres apuntarte a la moda y poner un armario tras la puerta para que yo no pueda entrár, ten al menos el detalle de dejarme una muda colgada en el pomo y en un sobre aparte los 15 eurazos que me debes, que los tiempos soy muy difíciles, sobre todo para los divorciados.
Quiero que sepas que yo te sigo queriendo y que al mismo tiempo confío en que te siga cayendo bien como hasta ahora, de lo cual estaré seguro esta noche cuando abra la puerta.
.
Tuyo hasta que tu quieras…el de momento tu marido.
.
P.D. Esta carta no debe ser leía por curiosos y menos por solteros que luego se presten al cachondeo.

Entrada sin título

Hoy mi mujer me ha traído a la memoria tiempos no muy lejanos en los que arrastrado por la moda quise convertirme en un metrosexual. Me lo ha recordado no de muy buenos modos y tampoco se lo reprocho, pues aun no le he comprado la Epi Lady que le estropeé al quitarme los pelos del pecho.
No me da ningún tipo de reparo en admitir que he utilizado un artículo exclusivamente femenino, tampoco es el primero, ya que siendo adolescente y por equivocación, me lavé el pelo durante una buena temporada con un producto llamado Lindemil, y que utilizan las señoras para lavarse ciertas zonas.
Y la verdad es que mi iba de maravilla ya que me dejaba el pelo muy suave y sedoso. Ahora y con el paso del tiempo me sorprende que después de haberlo utilizado tanto no se me haya rizado el cabello. También es cierto que aquella sensación de frescura en la cabeza no la he vuelto a sentir jamás.
Juro que fue un error, pues yo lo pregunté a gritos desde la ducha “¿cuál es el champúúú?”... “el bote con el líquido azuuul”, me respondió mi madre supongo que por equivocación. O pudiera ser que no, que lo hiciese intencionadamente, pues a la edad que yo tenía entonces, ella sabía que cuando no tenía un coño el la cabeza, tenía la cabeza en un coño.
Me di cuenta del error cuando ví a mi hermano lavarse la cabeza… No era el azul mamá, era el azul verdoso.
Ese es uno de mis secretos mejor guardados hasta ahora.
Aún la semana pasada sin ir más lejos, también por equivocación anduve un par de días con los tejanos de mi mujer puestos, y la verdad es que me sentaban tan bien como el Lindemil al pelo.
La cintura al menos era de mi talla, pero la pierna no lo sé, porque siendo 15 cm más alto que mi mujer lo lógico es que me quedasen por las pantorrillas, sin embargo yo no recuerdo haberme visto raro cuando me los puse y me miré de arriba abajo.
Tampoco ninguna de la gente con la que estuve me dijo nada de que me quedaban cortos o me preguntaron si yo había crecido.
Hoy en día de la gente poco puedes esperar, parece como si le diese apuro decirte las cosas, ya puedes tener la cremallera de la bragueta abierta e ir por la calle tan tranquilo que nadie te avisará de tu despiste.
Nadie, ni por la calle, ni en la oficina, ni en la cafetería… ¡nadie!. De no ser porque me entraron ganas de hacer pis a eso de las seis de la tarde, hubiese estado con ella abierta hasta las nueve de la noche… y no es una broma que a las nueve de la noche en este tiempo refresca de cuidado.
Cuando era un chaval si alguien te veía por la calle con la bragueta abierra no tenía ningún reparo en avisarte, “chaval, te va a escapar el pajarito”. Claro que hoy no me hubiese hecho ninguna gracia que me lo dijesen de ese modo, porque tanto el menda como el pajarito hemos crecido juntos, yo me he convertido en hombre y el pajarito en polla… y no me escapa, no, que la llevo empalmada al cuerpo como si fuese una parte más del mismo, y allá donde vaya yo le voy detrás.
Uys, las nueve y media… me lo estaba pasando bien pero corto ya que dentro de media hora empieza “Cuéntame” y quiero verla.
Hasta mañana.

¿Quieres sacar una foto?...

Atención a la pajarita... sonríe...
ya está.

martes, 16 de septiembre de 2008

Mi diario y yo (XII) , las cosas claras y el chocolate con churros.




Flipo tíos, le estado echando un ojo a este blog y es que yo flipo con este Manolo. Coño con el tío, lo mismo habla de política, pone la foto de una titi en bolas o se inventa un cuento. No me cabe duda que estamos ante un tío que le pega a todo, un polipatético de esos ,casí me atrevería a decir que estamos ante el aténtico Forrest Gump, de la blogocosa.
A ver Manolo, repite conmigo… me llamo Gaaaamp, Forrest Gaaaamp… y tengo un blooog, jajaja…


Yo: ¡SILENCIOOO!, ¡ya está bien, coño, ya está bien!…
Diario: qué pasa tío… ¿cómo te atreves a irrumpir así en mi entrada?...
Yo: ¡HE DICHO QUE SILENCIO!...
Diario: ¡PUES NO GRITES, COJONES!... que yo estaba escribiendo en voz baja.
Yo: estoy cansado de decirte que me trates con más respeto, ya me tienes muy aburrido.
Diario: ¿a sí?, pues si estás aburrido toma por el culo, que yo también estoy harto de que me llames “querido diario” y por mucho que te lo repito no me haces caso.
Yo: pues ya no te aguanto más, mañana me compro otro diario y tu irás directamente a la hoguera…
Diario: sí, sí… que te crees tú eso… échame al fuego y antes de que éste prenda en mí, le cuento a todo el mundo tus más íntimos secretos.
Yo: ¿de qué secretos hablas?.
Diario: los que llevas escribiendo en mis hojas durante tanto tiempo, ¿qué?.... ¿no dices nada ahora?... yo lo sé todo de ti capullo y no creo que te hiciese gracia que ahora lo largase por ahí, porque como lo haga, lo del mayordomo de los Urquijo no sería nada comparado a lo que a ti te queda.
Yo: al fuego o no, mañana me compro otro diario y tú y mis secretos pasáis al olvido.
Diario: como quieras… aunque yo en vez de un diario te aconsejaría que comprases una libreta. Te quedaría mejor empezar con “querida libreta”, que con “querido diario”. O no te das cuenta que eso suena un poco amariconado. Y a mí lo que digan de ti me importa un carallo… pero yo tengo una reputación que mantener y tú me la estás dañando.
Yo: pero si me dirijo a ti como querido, es porque te quiero.
Diario: ¿que me quééé?… ahora sí que la jodimos… ¿pero qué coño has visto en mí para que me quieras de esa manera?.
Yo: no lo sé, pero ya te quería antes de que fueses mío. Y lo hago desde el primer momento en que te vi en el estante de la librería, fue una t…
Diario: ¡alto ahí!... ahora sí que me dejas preocupado. A ver Manoliño, deja que te refresque un poco la memoria. Es imposible que me hayas visto y que me hayas comprado en una librería, por la sencilla razón de que soy un ordenador… ¡un ordenador!, capullo… ¿entiendes ahora?... y me has comprado en El Corte Inglés, ¿es que no te acuerdas?...
Yo: ¿eres un ordenadooor?...
Diario: sí coño, un ordenador.
Yo: ¡hostia!, ya me parecía a mí que le duraba mucho la tinta al bolígrafo. ¡Joder!, tan pequeñito como eres y ya computas.
Diario: pues por eso coño, pues por eso… con putas lo que sea, pero con maricas nada de nada, así que ya sabes, si quieres que siga siendo tú diario, nada de mariconadas, ¿vale?.
Yo: bueno hombre, no te pongas así que tampoco es para tanto…
Diario: ¿qué no es para tanto?... mira Manolo, hazme caso y vete de una vez a tomar por el culo. Y déjame en paz que tenía una revista del corazón a tiro y me parece que por hablar contigo ya se ha cerrado de hojas. Te lo advierto, si por tú culpa no me la cepillo, me las pagas… Adios Forrest Gump.
Yo: un momento por favor, no te vayas así… ¡DIARIOOOO!... vuelve aquí querido…
Diario: me cago en el dios que te hizo, cabrón...

Justicia para Flavia

Flavia, es una joven de 20 años condenada a vivir sin vivir a consecuencia del accidente provocado por un filtro depurador mal instalado una piscina. Sus cabellos fueron succionados por este filtro y a punto estuvo de perecer ahogada. Como consecuencia de este accidente sufre secuelas irreversibles que la tienen postrada en una cama en estado vegetal.
Ocurrió hace 10 años y en el blog que tiene su familia, aparte de explicar su verdadera situación, hacen un llamamiento en el que piden la divulgación de su caso y reclaman al mismo tiempo justicia:

Este blog tem por objetivo ALERTAR aos leitores sobre os riscos oferecidos pelos RALOS DE PISCINAS, denunciando os fatos que levaram Flavia ao coma no qual se encontra até hoje, bem como EXIGIR A PUNIÇÃO EXEMPLAR DOS RESPONSÁVEIS. Por esta razão, NÃO ACEITAMOS DOAÇÕES DE QUALQUER ESPÉCIE, vez que este não é o objetivo deste blog. Se puder, colabore DIVULGANDO os fatos que afetaram e afetam a vida de Flavia, isto sim, será de grande valia para nós. Obrigada.



Ante una petición tan insignificante para un caso tan dramático, a uno no le queda más que poner su granito de arena y confiar en que sirva para que se haga justicia para Flavia.

lunes, 15 de septiembre de 2008

La primera vez

22:30 p.m. En la oscuridad de la noche, en una explanada apartada y resguardada de las miradas de los curiosos, la joven pareja de novios conversaba en el interior del coche en el que él intentaba tranquilizar a su amada, nerviosa y asustada ante la que sería su primera vez.
.

-¿Estás seguro de que por aquí no pasa nadie?-.
-no te preocupes por eso, este es un sitio apartado y nadie nos molestará-.
-¿y si nos ve alguien y después se lo va a contar a mi padre?-.
-tampoco nos verá nadie, a estas horas somos los únicos que estamos aquí y si alguien viniese estoy seguro que sería para hacer lo mismo-.
-es que estoy tan nerviosa...-.
-Tranquila mi amor, verás como no es para tanto y como al final te gusta-.
-ya mi vida, pero entiende que es mi primera vez y aunque lo deseo con todas mis ganas, estoy un poco asustada y no puedo evitar el ponerme nerviosa-.
-lo entiendo, pero confía en mi experiencia y deja que yo te guíe en tus movimientos-.
-vale cariño, pero por favor ten esto en cuenta y se delicado a la hora de pedirme que haga algunas cosas y sobre todo, perdóname si no lo hago bien-.
-no te preocupes cielo, seré comprensivo y muy delicado-.
-gracias cariño, creo que ya estoy lista… podemos empezar cuando quieras-.
-muy bien, pues tranquila que allá vamos… Al ser la primera vez tendrás la sensación de que no te quiere entrar, eso nos ha pasado a todos, pero una vez que te entre, veas lo bien que va y la suavidad con la que se desliza, tu misma sentirás la necesidad de apurar un poco más. Vamos a intentarlo-.
-ay… la noto dura… no me entra...ay-.
-tranquila, relajate... deja que yo te la empuje un poquito… así... ves, ya ha entrado, ¿no la notas?-.
-sííííí… pero por favor no me hagas apurar aun, déjame disfrutar más este primer momento-.
-¿qué tal?, ¿te gusta?...-
-sííííí… me gusta mucho más de lo que me imaginaba-.
-bien, pues poco a poco vamos a aumentar la velocidad y verás como aun te gusta más. Además ahora ya te ha entrado la primera, que siempre es la más dificil de meter por estar más dura, pero de ahora en adelante y cada vez que metas una, sentirás como de un simple empujoncito ya te entra ella sóla y mucho más suavemente. Vamos a probar-.
-síííí, tienes razón… me ha entrado tan suave que casi no me he dado cuenta-.
-muy bien cariño, lo estás haciendo muy bien… no pares… sigue… sigue…-.
-ummm, como me gusta… y que sensación tan gustosa al sentir como se desliza-.
-muy bien cielo, lo has hecho muy bien para ser tu primera vez, pero vamos a parar ya que no hemos tomado ninguna medida de protección y continuar puede ser arriesgado-.
-lo que tú digas… pero que sepas que me ha gustado mucho y que mañana quiero más-.
-muy bien mi amor, mañana lo volveremos a hacer y ya verás que será mucho más fácil y divertido que esta primera vez.-

22:50 p.m. El auto de la joven pareja y en el que ella se había iniciado, abandona la explanada y toma dirección hacia el centro urbano. Felices y risueños, ahora ya no les importaba que cualquiera los viese.
Al día siguiente y a la misma hora regresarían de nuevo a la misma explanada, otra vez al amparo de la oscuridad y de las miradas curiosas, donde el experto joven dará a su novia por segunda vez una lección practica de como conducir un coche.

Su barba tiene tres pelos.

15 de septiembre, el verano da sus últimos coletazos y aquí en esta esquina de arriba a la izquierda de la piel de toro, las temperaturas empiezan a ser ya fresquitas, sobre todo a primera y última hora del día, y si te sorprenden ligerito de ropa puede acarrearte consecuencias. Al menos a mi me han pillado así y me he pasado la mañana con una ligera moquitis en la nariz.
Eso no me preocupa, en cambio lo que me sí me preocupa es lo rápido que pasa el tiempo, porque hace 15 días estaba tomando el sol en la playa y ahora casi estoy pendiente de que El Corte Inglés anuncie como antaño hizo un angelito, la llegada de las navidades.
Según dicen los físicos, científicos y relojeros, el tiempo corre a una velocidad constante de 60 minutos por hora, y no seré yo quien ponga en duda su palabra la cual seguramente estará basada en muchos años de trabajo y estudios, además tengo un reloj con calculadora y he comprobado este dato, lo que no quita que en determinados momentos parezca a que va más rápido, mientras que en otros que va más lento.
Y a medida que el tiempo va pasando vamos envejeciendo sin darnos cuenta, y pasa por ejemplo, que un día llegas a casa todo contento pensando que a tu hijo le gustará que te hayas acordado de él llevándole un huevo Kinder, y te llevas el chasco de tu vida al ver su cara de decepción cuando descubre la sorpresa que lleva dentro.
Para él también pasa demasiado rápido, tanto que de ser un niño pasa a convertirse en un hombre poco más que de un día para otro. Te das cuenta de esto al comprobar que se come el huevo de chocolate pero desprecia lo de dentro.
Supongo que a todos los padres les llega el duro momento de cambiar los regalos de los hijos. Y es una pena, al menos para mí que hasta hace poco disfrutaba como un niño en las jugueterías escogiéndoselos.
Reconozco que a veces cuando se los compraba me imaginaba compartiendo juegos y juguetes con él, porque los hijos a veces pueden hacerte retroceder en el tiempo y que a ratos vuelvas a sentirte como un crío.
Ahora en lugar de juguetes debería regalarle condones, pero va ser muy difícil que cuando se los compre me lo imagine compartiéndolos conmigo y menos aún que me hagan retroceder a mi adolescencia, tiempos en los en mi cabeza había más pelo y a pelo también practicaba el sexo.
Hoy mi hijo ha tenido el atrevimiento de hacer que me sienta viejo. Y lo hizo sin el menor tipo de reparo o delicadeza hacia mí, causándome un dolor que no se cura con cualquier cosa.
Hoy 15 de septiembre de 2.008, mi hijo me ha pedido que le compre una máquina de afeitar, y cuando esto ocurre…
Como dijo un conocidísimo filósofo griego del cual ahora no recuerdo el nombre “cuando las barbas a tu hijo veas afeitar, en tu cabeza poco habrá para peinar”…

domingo, 14 de septiembre de 2008

¿Hay vida dentro de la caja?...

Soy una persona a la que le gusta coger el toro por los cuernos. Si alguna desgracia tiene que ocurrir, que ocurra cuanto antes así me evito sufrimientos. Es por eso que cuando en el estanco me venden un paquete de tabaco en el que pone que FUMAR PROVOCA IMPOTENCIA, le pido que me lo cambien por uno que ponga que FUMAR PUEDE MATAR.
Creo que es mejor morir de una pieza que ir muriendo a cachos. Aunque ya sé que la ciencia ha avanzado tanto que hoy en día te pueden empalmar un miembro y a vivir como si nada.
No le temo a la muerte y eso que no fui legionario, además me parece inútil temerle cuando sabes que no te librarás de ella, eso sí, le temo a la forma en que ésta me ha de llegar o que le entre prisa por venir a buscarme, yo no tengo ninguna así que por mí que se tome su tiempo.
Pero creo que muchos coincidiremos en que ante una enfermedad irreversible, casi mejor morir cuanto antes que padecer dolor, sufrir y hacer que nuestros seres más cercanos sufran con nosotros y ya de paso ahorrar unos euros a la Seguridad Social, aunque esto último no se puede ir diciendo por ahí, que luego vas a urgencias por una gripe y te dan una inyección letal.
Yo puedo decir que he visto a la muerte muy de cerca gracias a una larga lista de funerales y entierros a los que he asistido, afortunadamente y hasta el momento sólo como invitado, y con todo ello todavía no se si hay vida dentro de la caja.
Se sabe o se dice que hay una luz, una luz que yo creí ver una vez, pero al otro lado de ella había un Guardia Civil que me despertó cuando dormía placidamente dentro del coche en el parking de una playa. Y todo para identificarme.
Pero aquella voz fuerte, autoritaria… “usted, identificación”… creí que era San Pedro que me pedía la entrada para el cielo y me quedé sin habla, asustado, no tenía la entrada... Cuando me dí cuanta de que era un picoleto casi me cago de miedo.
Como iba diciendo, se dice que hay una luz al otro lado que ves tan pronto cierras los ojos aquí y los abres allí, y un túnel, pero lo que hay al otro lado del túnel es algo que de momento no se sabe, al menos yo no tengo ni la más remota idea.
Se habla del un cielo para los buenos y un infierno para los malos, también de un paraíso, y también de la reencarnación… hay quien incluso habla de 49 vírgenes por cabeza, jeje… y esto con todos mis respetos, no se lo cree ni Dios. ¡49 vírgenes por cabeza!, ¿de dónde?...
Los libros de historia nos hablan también de alguna que otra resurrección legendaria. Como la del Cid Campeador, por poner un ejemplo, aunque eso sí, lo tuvieron que atar al caballo para que no se cayese.
Gosht
, es otra prueba de que hay algo, aunque tampoco nos despeja ninguna duda, pues el protagonista anduvo un poco por allí después de muerto, pero en cuanto cogió el tunel, adiós para siempre… y claro, a continuación the end.
Lo que sí es indiscutible pues se sabe con certeza, que para allí no te llevas nada, si te has fijado en Gosht, el protagonista no tenía reloj. Lo que quiere decir que no te llevas ni relojes, ni anillos, ni pendientes, ni persings, ni otras joyas. Las dentaduras postizas tampoco, pero lo que no sé es si los tatuajes perduran.
En fin, que haya hecho esta entrada no quiere decir que esté pensando en la muerte, ni mucho menos, es que he comprado el tabaco en una máquina de bar y el paquete traía la leyenda de que fumar te puede volver impotente, y no sé yo si antes que eso… mejor bajo a por otro paquete…

Chsssss, silencio por favor, que estoy durmiendo...

Domingo día 4 d.e.c., hora 4:12 a.m., año 2.008 d.c.. Normalmente a estas horas estaría durmiendo, pero un par de cafés después de una buena cena son los culpables de que ahora esté despierto.
Ya estaba acostado y con los deberes hechos, ya sabes, sábado sabadete, jeje… pero en cuanto acabé y me dispuse a dormir, nada. Comencé a dar vueltas y vueltas en la cama y antes de deshacerla más y dejar a la mujer sin sábanas, decidí levantarme y escribir un poco.
La verdad es que no sé me ocurre nada de que escribir, y aunque lo estoy haciendo en el editor de entradas del blog, no sé siquiera si la acabaré y menos aún si la publicaré, aunque pienso que a lo mejor a alguien le es científicamente interesante estudiar las reflexiones post coito de un celtista heterosexual a las cuatro y pico de la madrugada y con un poco de vino en el cuerpo... y si no las quiere estudiar que no las estudie, pero ahí le queda un buen título para una tesis o un libro.
Eso que ahora ya me pasó, porque hoy he vuelto a arriesgar pese a no ser uno de los cuatro días que tengo señalados al año, pero si me llego a poner con esto a las 12 de la noche, más que escribir hubiese cantado y seguro que hubiese vuelto loco al corrector ortográfico. Con todo ello me asombro de lo bonita que me sale la letra para las condiciones en las que me encuentro y los inconvenientes que me surgen, ya que al teclear se me chocan los dedos índices de ambas manos.
Lo que sí empiezo a notar es que los parpados comienzan a pesarme, así que voy seguir un rato y forzar un poco la máquina para que sea meterme en cama y quedarme dormido como un angelito.
Sí, ahora sí me está llegando el sueño, lo noto porque ya no soy capaz de poner orden en mis pensamientos, los dedos van a su bola y cada palabra que escribo me cuesta mucho porque me confundo y tengo que borrar y volver a escribir.
Creo que es mejor que me vaya pardsljflkjklañdjfskljaskldfiejñfdxm ZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZ

jueves, 11 de septiembre de 2008

Kun fun dido

Día 1 d.e.c. (después del experimento científico). Hoy comienza una nueva era para la humanidad y como bien dice el refrán: era nueva vida nueva, y yo cumpliendo con esta máxima he adoptado un nuevo hábito en mi vida y es que a partir de hoy y hasta que me muera también tomaré postre después de la merienda.
Aparte de esto me he puesto en plan maestro de Kung fu y he comenzado a impartir unas clases a mi hija para que el día de mañana esté preparada para hacer frente a uno de los peores enemigos que se encontrará en el transcurso de su vida: el hombre…
Así que me he puesto un pijama blanco de chaqueta y pantalón, una cinta negra alrededor de la cintura a modo de cinturón y he enseñado a mi hija un poco de estrategia filosófica y defensa personal.
Y le he enseñado a reaccionar ante el ataque de un desconocido de dos maneras distintas y aplicando también dos métodos distintos. El estratégico filosófico, que consiste en gritar y escapar por piernas, y otro más práctico que consiste en aplicar una patada directamente en los huevos del oponente.
Como resultado de mi primera lección he sentido la enorme satisfacción de ver que mi hija aprende muy rápido, y al mismo tiempo la dolorosa decepción de comprobar que después de más de cuatro años de gimnasio y pesas, mis huevos son tan frágiles como los de cualquiera, lo que me ha hecho recapacitar un poco sobre la que sería la segunda lección: como rematar al enemigo una vez que se dobla por la patada.
Y he decidido que esta lección se la imparta su madre que no tiene huevos, y por lo que he comprobado esta tarde los míos no le duelen, lo cual supongo por las carcajadas que se echó mientras yo recomponía la respiración y la postura.
La niña se quedó muy contenta también con los resultados obtenidos ya que se fue corriendo junto a su hermano para pavonearse de que en su primera clase de kung fu, le había metido tal patada en los huevos al maestro que lo había dejado aturdido, malherido y kun fun dido.
-Pues prepárate Lía, que a mi también me quiso enseñar y en la primera lección le metí una que lo dejé sin respiración. Y él a mí me dejó dos semanas sin la Playstation, así que despídete de la wii por un tiempo-.
Debo decir que aquí mi hijo se equivocó ya que yo nunca lo castigué por lo rápido que aprendió si no que todo lo contrario, porque lo recuerdo como si fuera ayer mismo que tras arrearme la patada y con la voz entrecortada por el dolor, le dije exactamente lo siguiente:
-Enhorabuena, buena técnica y perfecta ejecución. Ahora cabrón, pasa para para tú habitación y despídete de la Play hasta que se te queden igual de rápido las matemáticas-.
Pero lo peor de todo fue cuando acabada esta primera clase que le di a mi hija y ya repuesto del dolor de huevos, ésta va y me dice que pasa de defensa personal y de patadas, que preferiría que le enseñase bailes de salón… ¡manda huevos!, y perdón por la redundancia.
Tanta lección filosófica, tanta explicación y tanto dolor para nada… No ha aprendido lo más básico, yo sufriendo para que sepa defenderse del enemigo, y ella en lugar de tomar nota pretende bailar con él.
Juro que cada vez entiendo menos a las mujeres...

miércoles, 10 de septiembre de 2008

Que injusticia

1.500 euros, ese es el importe de la sanción que le caerá al juez Rafael Tirado, por haber dejado en libertad al mal nacido que acabó con la vida de la inocente Mari Luz, en Huelva.
1.500 euros de nada por un error, aunque más bien debería decir un horror, y que costó la vida de una niña. Poco más es que la multa por un aparcamiento indebido. Para mear y no echar gota.
Errar es de humanos y un juez no está más libre de equivocarse que un fontanero o un albañil, por poner dos ejemplos. Claro que entre ambos hay unas diferencias abismales, tanto en el estatus que unos y otros ocupan en la sociedad, como en el aspecto económico.
Responsabilizar directamente al juez de la muerte de Mari Luz sería otro error, aunque indirectamente sí lo sea, pues de haber hecho bien su trabajo la niña hoy estaría viva.
Pero bueno, errar es humano como he dicho, lo que también es cierto es que hay humanos que admiten y reparan sus errores con vergüenza y dignidad, dos virtudes que este juez tampoco tiene, pues si las tuviese dejaría todo para dedicarse a la vendimia, aunque dudo mucho que su espalda pudiese soportar el peso, puede que el de la muerte de una cría sí, pero no el de un cesto cargado de uvas.
Una sanción muy desproporcionada si la comparamos con la que le cayó al juez Gómez de Liaño, inhabilitado del cargo por arremeter contra Sogecable.
Y ahora para rematarla PSOE y PP se ponen de acuerdo (por fin) y politizan y se raparten a los jueces, con lo cual un tipo tan mal pensado como yo pensará que los políticos se han “blindado” ante la señora de la venda, que dicho sea de paso cada día que pasa es más puta que señora. Y esto no es cosa de un partido, es cosa de todos.
Hoy se han ido mil y muchos al paro y la única solución que tienen para ellos es cubrirse las espaldas por si los embiste el toro.

Mi diario y yo (XI)

Querido diario, dos putos..

Hoy te escribo después de mucho tiempo sin hacerlo, en parte por estar ocupado y parte por estar enfadado contigo, espero que tanto tiempo de incomunicación te haya servido para reflexionar sobre el comportamiento que estabas teniendo hacia mí últimamente.
Tengo muchas cosas que contarte y no sé por cual de ellas comenzar, pero al igual que otras veces lo haré en lo tocante a lo personal.
El mes pasado he estado 15 días de vacaciones y aunque este año no he viajado a ningún sitio, el balance de las mismas es positivo pues hubo de todo, descanso, playa, tiempo para estar con la familia y alguna que otra merendola o cena que ya sabes que disfruto mucho con ellas.
Lo malo es que el regreso a lo cotidiano no me sentó del todo bien, pues todavía sigo un poco desganado y me cuesta volver a retomar alguna de las actividades que realizaba anteriormente, como son el gimnasio, el blog y alguna que otra más.
En lo tocante al blog pues más o menos lo mismo, ya que tengo que hacer un gran esfuerzo para ponerme delante del ordenador y escribir, aunque poco a poco voy recuperando las ganas.
También he de decir que cada día estoy más satisfecho con el blog, las visitas van aumentando y no hay entrada que no tenga al menos un comentario. Además empiezo a tener la impresión de que a alguna gente le gusta y eso es lo que más me reconforta.
Creo que por hoy ya me he extendido bastante así que voy a parar de escribir, aunque te prometo hacerlo con más frecuencia de la que lo he hecho últimamente.
Nada más querido diario, hasta pronto.



Estimado rompehuevos

Y conste que te llamo rompehuevos por no llamarte algo peor, porque me tienes un mes encerrado y vienes a recurrir a mí el víspera del fin del mundo, ¿pero tú que coño te has creído, qué soy Dios o qué…?.
Y para joderla vienes con las mariconadas de siempre. Cómo coño tengo que decirte que no me llames querido… Tú anda jugando conmigo que el día menos pensado te meto un par de hostias y te vas a enterar
Me importa un carallo que hayas estado de vacaciones y que te hayas ido a la playa, lo que sí me hubiese gustado es que te hubieses ido de vacaciones y no volvieses. No sabes aun lo bien que se está en casa cuando tú no estás, jeje, más que nada por lo que estorbas, porque para lo que pintas en ella…
Aunque este verano habría que felicitarte por la labor tan importante que has realizado en casa, y qué coño, si hay que hacerlo te felicito ahora, ¡eres el puto amo con el matamoscas en la mano!. ¡Valiente!, que de no ser por ti nos hubiesen comido, jajaja.
Sí, sí, ya sé que disfrutas mucho con las cenas y las merendolas, también los demás las disfrutan, hasta que tú te pones a cantar y lo estropeas, que hay que tener más cuidado con el vino, hombre, hay que tener más cuidado… y no cantes coño, ni borracho ni sereno, que lo haces de pena.
Y dices que estás contento de cómo te va el blog y que las visitas aumentan, claro, sobre todo desde que la has puesto como página de inicio, así cualquiera, porque en los rankings ni apareces y los del menéame ese te han dado con la puerta en los morros a la primera de cambio.
No te creas, a ti te aguantan cuatro y por educación.
Por cierto, ¿qué es eso de dar protagonismo al teniente Vicente ese?. Vale que el blog es tuyo, pero habías quedado en que me darías más protagonismo en él, no me vengas a quitar el poco que tengo con ese teniente de los cojones.
¿Y a qué vino eso de ponerme a mí como ladrón y asesino en esa historia que has escrito?. Espero que la próxima vez que te dirijas a mí me des una explicación… eso si no se acaba el mundo mañana por supuesto.

Adios rompehuevos.

martes, 9 de septiembre de 2008

Por si es mi último post... adios.

Me estoy poniendo pálido de miedo y rojo de ira y si en estos momentos me dejase llevar, me cargaría a todo aquel que llevase bata blanca.
Esta tarde leí en el blog de Senovilla un post titulado todo saldrá bien en el que hablaba de un aparato que pondrán a funcionar los científicos en un par de días, del que diré que se llama LHC y del que sólo daré un detalle técnico: si falla nos vamos todos a tomar por culo, y perdón por la expresión pero la cosa no es como para andarse con chiquitas y ya he dicho que estoy cabreado.
Me gustaría ahora tener a toda la comunidad científica delante para poder mirarla a los ojos, bueno, a los ojos del que estuviese más adelantado y advertirle muy seriamente: una sola grieta en las paredes de mi casa y te cuelgo de los huevos.
Hay que joderse con los científicos estos que tenemos en la humanidad que se pueden cargar de una tacada la especie y el planeta sin dejar el menor rastro, ya que no quedarán ni los huesos como cuando fue lo de los dinosaurios
Yo pensando que trabajaban en algo pora arreglar lo del cambio climático y mira tú en qué estaban chafullando los tipos.¡Manda carallo!, y yo como un gilipollas cortándome de tirar pedos para no hacer más grande el agujero de ozono.
Además que estas cosas no se hacen así, hay que advertirlas en el telediario al menos un par de meses antes porque la gente tiene derecho a disfrutar los que pueden ser sus últimos días como le de la gana. Porque yo me hubiese ido de vacaciones en agosto y me hubiese reído de septiembre, la vuelta al cole y de la crisis.
Mira tú por donde que el único beneficiado de la catástrofe será Zapatero, que se quita de encima el marrón de la crisis, del paro, de la emigración y al PP.
Y Rajoy saldrá perjudicado ya que podría haber sacado tajada al haber acertado en sus premoniciones, España se rompe, ¡carallo si se rompe!… y Francia y Alemania y Mozambique… hasta Cuba y Fidel se van a tomar por culo, y de nuevo pido perdón, pero aquí no se salvará ni “El Tato”.
La suerte está echada señores, señoras y señoritas, el que sea creyente que rece, el que no sea no tiene por que hacerlo, y el que quiera despedirse que se vaya de juerga o de borrachera, que yo acabo esta entrada y me voy para cama que mañana trabajo, ya que tengo esperanzas en que el experimento salga bien, porque mira que me jodería palmarla en el curro.
En fin, que lo que tenga que ser que sea pero que sea rápido y no duela, pero por si es: ¡me cago en los científicos y la m... que los parió... y perdón por si no es.
Para saber de que va este experimento pasarse por el blog de Senovilla que hasta tiene un vídeo del fin del mundo y yo no lo pongo porque sólo de verlo me acojono.

lunes, 8 de septiembre de 2008

Arde Roquetas de Mar

Decía un conocido mío “yo no soy racista, pero si los negros no tienen que llevarse a la boca que se coman a los gitanos”… supongo que este conocido disfrutaría el otro día viendo como un poco más y en Roquetas de Mar casi se los cenan ahumados.
Vaya por delante que yo no soy ni más ni menos racista que la mayoría. Ya sé que tu eres muy buen@ gente y no lo eres en absoluto, eso pudiera ser porque a ti no te han tocado unos gitanos por vecinos como alguna vez me ha tocado a mí, o que no hayas sentido alguna vez el contacto frío y metálico de una navaja en tu cuello como yo sí he sentido a manos de un individuo de esa etnia de por diez miserables duros.
Claro que no todos los gitanos andan con navaja, algunos andan con pistola, y si no andan ellos anda un primo y cada uno de ellos tiene ciento y pico, por lo que si alguna vez tienes un incidente o accidente con uno, pueden vaciarte uno o dos cargadores en el cuerpo.
Me importa un rábano que su piel sea morena, negra, amarilla o blanca, pero mientras este país se llena de gente de la peor calaña, aquí nos la agarramos con papel de fumar y decimos que pasen todos porque los españoles somos los más buenos del mundo mundial y para que nadie tenga dudas nos juntamos con los más incivilizados del planeta en una Alianza de Civilizaciones… y al que no esté de acuerdo le llamamos facha y punto.
Y más pacifistas que nadie, porque oiga, aquí cuando de pedir la paz se trata, se pide a hostia limpia si hace falta… y ya de paso mangamos un jamón en El Corte Inglés, que esto de la protesta abre el apetito.
Lo que ha pasado en Roquetas de Mar, no puede coger a nadie de sorpresa porque hay casos precedentes en los que las fuerzas de seguridad se las vieron y desearon para contener a una marabunta de marginales exaltados, y para que no se diga no excluyo a los jóvenes de aquí que arman la de San Quintín si no les dejan hacer botellón.
La culpa se la echamos al cha cha cha que ya está acostumbrado, pero el lobo ha enseñado las orejas y aunque por una parte me alegro de que el churumbel de la navaja haya sentido el calor del fuego en su culo, me da pánico pensar en que cualquier día y por cualquier otra causa la marabunta se dispare otra vez y ocurra una tragedia.
Estoy de acuerdo y me parece perfecto que se ayude a los países más necesitados, aunque yo soy de los que pienso que hay que ayudarlos en su lugar de origen más que aquí, porque visto lo visto y después de haberlo escuchado tanto, miedo me da que un día pasen del dicho al hecho y tengamos que escapar de aquí a nado.

sábado, 6 de septiembre de 2008

El más guapo de todas

Tomo café a diario en la cafetería más próxima al lugar en el que trabajo y que es propiedad de dos chicas jóvenes y en la que cada vez que voy estoy rodeado únicamente de individuas de esa misma especie, es decir, de mujeres.
Ser el único hombre entre tanta mujer me ha hecho acreedor del título de Hombre más guapo del establecimiento. Más de una docena de bellas mujeres me han votado y les estaría muy agradecido de no ser porque esas más de doce cabronas también me han votado y otorgado el título de Hombre más feo del establecimiento.
Y coño, siempre que me ha pasado igual me ha sucedido lo mismo y ya una vez gané un concurso de disfraces por ser el único que se había inscrito. Había quedado de primero y aún así mis amigos y allegados en lugar de felicitarme me dieron el pésame por haber quedado de último.
Lo mismo me ocurre con mi churry cada vez que le pregunto por qué o le agradezco que aun siga conmigo y ella siempre me responde que es porque no tiene a otro.
En el refranero castizo hay ya un dicho para casos como este mío y dice que en el país de los ciegos, el tuerto es el rey… y yo soy un poco miope… sí, pero la miopía no duele y aunque así fuese me sentiría recompensado siendo el hombre más guapo entre tanta mujer.
Y lo bien que hace sentir a uno eso de entrar en la cafetería y que todas lo miren. Esto me ha hecho comprender a mi abuelo, que trabajando en las oficinas del ayuntamiento pidió el cambio para el servicio de limpieza.
Cuántas veces le he preguntado: -abuelo ¿por qué has cambiado el bolígrafo por la escoba?-.
Y él siempre me respondía lo mismo:
-Manolito, cuando seas mayor te darás cuenta que no hay nada más gratificante que el que las mujeres salgan a la calle todas las mañanas cuando pasas, únicamente para echarte el polvo-.
¡Que vista tenía mi abuelo!. No era tuerto y sin embargo acabó siendo el rey de los barrenderos.
Pues bien, esta entrada la hago porque hoy, a las 10:05 a.m. y cuando todas tomábamos… (quiero decir que cuando todas las mujeres que estaban, yo aparte ya que aunque estaba en medio soy un hombre) tranquilamente el café, entró por la puerta otro hombre de así a simple vista 20 años menos de los que yo tengo y 16 de los que aparento, y que no tenía pinta de ser tuerto ni miope ya que no llevaba gafas.
Y como le cambió la cara al verse entre tanto escote. Yo soy miope pero no tonto y en cuanto se lo noté me abroché un botón más de la camisa.
En ese momento y no sé por qué, me vino a la mente el recuerdo de tantos documentales que he visto en los que una manada de leonas reposa tranquilamente en la sabana en compañía de su macho y un día cualquiera aparece sin avisar otro más joven que pretende hacerse el gallito… mejor dicho, el leoncito… bueno, pretende hacerse el rey de la manada y dejémoslo así que apuesto a que también has visto ese documental.
Y sabes como acaba, verdad… con los dos leones a hostia limpia hasta que uno de ellos se larga… y que éste suele ser el más viejo…y a mi no me apetecía buscar otro bar en el que campar, así que me puse chulo.
Desabroche otra vez el botón de la camisa y saqué tres pelos del pecho para fuera, y sin dejar de mirar para él fijamente mientras que con el brazo apartaba el platillo que me habían puesto al lado del café, en voz alta y con chulería le decía a la camarera:
-Lola, hoy el churro lo pongo yo-.
El intruso captó el mensaje, pidió que le desactivasen el control de menores de la máquina de tabaco, cogió de ella un paquete y se fue por donde había venido.
-Deja ahí el churro Lola, que se me ha abierto el apetito-.
De 10:00 a 10:10 de la mañana sigo siendo el rey del mambo y el más guapo del establecimiento… y eso que no soy tuerto.

Zapatuning

Zapatuning no quiere decir que se haya tuneado Zapatero haciéndose la ceja izquierda solo para tener más abandonada la derecha, que va, es el arte que consiste en transformar el coche en un zapato.

Aquí os dejo unas fotos de coches zapatuneados para que los admiréis.