El culo de los simios

Hoy he leído una noticia que me parece de lo más curiosa y en la que decía los chimpancés, reconocen a sus familiares por el trasero.
Esta es una prueba más de que el hombre desciende del mono, porque a ver quien es el chulo o la chula que me niega que no se fija en los culos de la gente, eso sí, con la diferencia respecto a los simios en que nosotr@s sólo miramos los culos cuando nos parecen bonitos, mientras que para reconocer a los familiares utilizamos los apellidos.
Hasta la fecha jamás me había fijado en los culos de los monos, sin embargo si me he fijado muchas veces en el culo de alguna señorita muy mona y apuesto a que también podría reconocerla por el trasero aunque me intentasen confundir mezclándola en una manada, pero no es lo mismo claro.
Y esta es una prueba más de lo poco que ha evolucionado el ser humano con respecto a sus antepasados pues tal como apunta a este estudio es natural que los monos miren el culo de otros de su especie para identificarlos, mientras que nosotros los humanos seguimos con nuestros perjuicios y sólo podemos mirarlos disimuladamente, porque si lo haces con descaro te pueden llamar la atención o incluso coger mala fama.
Porque me imagino que poca gracia le haría a mi mujer y por poner un ejemplo, que le dijese algo así como: aquella que va por allí es mi prima, la hija de la tía paca, la conozco por el culo.
Y qué decir si algún día te presentan a alguien y le sueltas eso de: yo te conozco de vista, tu culo me suena.
Les parecería mal a ellas y a nosotros, pues no creo que te hiciese mucha gracia que tu mujer por la calle te dijese señalando a otro: ¿dónde he visto yo ese culo?.
Y que decir de los bebés y esa manía de sacarles parecido, que si los ojos son de su abuelo materno y las orejas de un primo de la madre. Imagínate que después de dar a luz te aparece la matrona con el crío en brazos diciéndote: tiene el culo como su padre.
Y eso es porque moralmente no estamos a la altura de nuestros antepasados, si de verdad hubiésemos evolucionado en el DNI aparte de la huella y la foto de cara, debería llevar en el reverso una foto de nuestro culo.
Claro que después te verías obligado a afeitártelo, que menos que tenerlo presentable, porque a lo mejor lo correcto sería que en lugar de los besos de presentación en las mejillas darlos en las cachas.
Pajas mentales aparte, debo decir que me parece interesantísimo que sigan investigando a los monos, porque no es ésta la única coincidencia que tenemos con ellos que han descubierto, y estoy seguro que algún día nos sorprenden con otra.
Además de que conviene conocerlos bien, porque quién sabe… a lo mejor el día menos pensado éste se convierte en el Planeta de los Simios.
En fin, me tomo un plátano y me voy para cama…