Hola Andreu

Distinguidos lectores, queridísimas lectoras, querid@s amig@s, etc. etc. y etc. Cuando aquí en mi tierra mi reloj de pared marca las 20:33 o'clock en punto, en la tuya será la hora que marque el tuyo, independientemente de que este sea de pared o de pulsera. En caso de que el tuyo sea un "reloj de cuco", marcará la hora que el pájaro quiera.
Hoy le he echado un par de huevos al asunto y le he escrito un e-mail a Andreu Buenafuente recomendándole o ivitándolo a que se pase por mi blog. De haber podido le hubiese echado más que un par de huevos, pero como sólo tengo dos no le he podido echar más de los que tengo, de todos modos y para presionarlo le he dicho que soy Inspector de Hacienda... y si cuela, cuela, pero sé por experiencia que para los catalanes la pela es la pela.
Y bueno, que un "Ispector de Hacienda" te invite a pasar por su blog es algo que acojona tanto a un catalán como a un madrileño, por eso casi tengo la certeza que se pasará por aquí aunque sólo sea para ver que intenciones tengo.
A mí en particular no me asustan ya que no tengo ni puta perra, es más, si alguno de ellos intentase hacerme una inspección le quito para café y tabaco.
El caso es que le he escrito a Buenafuente, aunque probablemente mi correo vaya directamente a la bandeja de correo no deseado y de ahí a la papelera. Pero coño, después de más de tres años estrujándome el coco para escribir cuatro paridas y media, algo tenía que hacer para darme a conocer. Y después de pensar seriamente en este tema se me plantearon dos opciones: una era esa y la otra era levantarme del retrete y mostrar al mundo mi paquete.
He barajado las dos opciones hasta que se me encendió la luz y me dije yo a mi mismo: "Manolo, no es lo mismo ni parecido el que se rían contigo a que se rían de tí", y consecuentemente con las consecuencias que podrían traer el mostrar mi paquete, me he decidido a escribirle y de mí que se siga riendo mi señora, a la cual debo agradecer que lo haga en privado.
La verdad es que dudo que se deje caer por aquí, supongo que el hombre estará muy ocupado con su trabajo especialmente ahora que estamos en tiempo de vacaciones. Pero oye, ¿y si suena la flauta por casualidad?, como dijo Juan Ramón Jimenez al burro.
Porque como he dicho cienes y cienes de veces en este blog, yo soy muy guapo y salgo muy bien en la tele. Y esto lo sé con certeza pues he tenido que visualizar casi 200 veces el vídeo de mi boda y lo he comprobado, trajeado, afeitado y bien peinado en la tele salgo como un verdadero galán. Cierto es que a partir de las 7:00 o'clock en punto de la tarde en dicho vídeo salgo con los ojos rojos y vidriosos del medio pedo que llevaba, y eso no tenía arreglo ni con traje ni afeitado... el peinado a aquella hora ya no me quedaba bien ni en el carallo ni sus alrededores.
En fin, que a lo mejor se deja caer por aquí aunque lo dudo. De todos modos y por si lo hace saludarlo como se merece, si no lo hace dejádmelo, que en el próximo e-mail que le escriba lo amenazo con una inspección en toda regla.