lunes, 11 de julio de 2011

¡Manda carallo!

Distinguidos lectores, queridísimas lectoras, querid@s amig@s, etc. etc. y etc. Siguiendo con la entrada anterior a la anterior, es decir, en la que comentaba y daba pistas a la policía para el esclarecimiento del caso del robo del Códice Calixtino cometido en la Catedral de Santiago y al cual yo llamaba pergamino, he de decir que según leía en la prensa de ayer, hay muchos más puntos en los que investigar de los que yo mencionaba en la entrada de marras.
El caso es que ayer leía en la prensa más noticias sobre el caso, las leía sentado en el bar que está situado frente a mi casa cuando después de leer lo que había leido, de dentro de mis adentros me salió en voz alta y sin quererlo la siguiente exclamación: "¡MANDA CARALLO!".
En ese momento las miradas de todos los consumientes y consimientas se volvieron hacia mí, y al darme cuenta de ello y como estaba afeitado volvía a exclamar otra vez en alto: "¡MANDA CARALLO!".
Y es que las noticias que había leído no eran para menos y para daros cuenta de lo que digo diré que estas eran las siguientes: "La llave donde estaba el Códice custodiado estaban puestas en la cerradura de la puerta" y la otra era de que con el valor de dicho papel se podría paliar al hambre de todo el continente africano durante medio año.
¿Qué?... ¡Manda carallo!, ¿a que sí?... vamos, que después de esto a uno se le quitan las ganas de poner la cruz de marras para el sostenimiento de la iglesia en la declaración de la renta. Conste que servidor nunca la ha puesto porque siempre le sale a devolver, pero la cosa tiene cojones, mejor dicho ¡manda carallo con la cosa!.
Y yo me pregunto si es que hay Dios ¿qué pensará Él de esto?,o ¿qué pensará Jesucristo quien en sus tiempos se lió poco menos que a ostias con los mercaderes de un templo?.
Señores, señoras y señoritas, que alguien me lo explique porque yo no me lo explico. ¿Cómo los curas tienen un papel que puede dar a tantos y tantos de comer y sin embargo todos los días en misa reducen el cuerpo de Cristo a ostias para que lo coman los feligreses que van a comulgar?.
Sí, querid@s lectores, lo reducen a ostias y luego lo reparten, y esas partes de su cuerpo reducido a veces sobran y otras faltan, porque recuerdo el caso de un sacerdote jerezano al que le faltó una ostia para dar de comulgar a una vieja feligresa. Cuando se percató de ello ordenó al monaguillo que recortase el trozo de una pandereta y con ella engaño a la pobre vieja.
Acabada la misa la vieja se acercó al sacerdote y le preguntó si lo que le había dado a comulgar era el Cuerpo de Cristo, a lo que él respondió que sí. Y la vieja que no encontraba explicación a lo que tenía aún en la boca le dijo: "pues mire padre, a mí me debió tocar la polla porque cuanto más la chupo, más dura se pone".
Por eso digo yo y por enésima vez en esta entrada: ¡manda carallo con los curas como nos engañan!, y eso para que después se quejen de que cada vez hay menos vocación y menos feligreses.
¿Y cómo cojones van a tener más si la gente se está dando cuenta de que nos la están metiendo doblada?.
Yo que soy de los que no va a misa salvo comuniones y entierros, pero desde ahora iré menos y si alguna vez tengo que hacerlo por mis huevos que les desvalijo los cepillos, y por lo que a mi respecta les pueden dar a todos ellos por donde amargan los pepinos.
He dicho... y que no se entere Jesucristo, pues estoy seguro que de saberlo, Él será quien los reduzca a ostias a ellos y que se los coman los cerdos.

2 han comentado:

Eulogio Diéguez Pérez (Logio) dijo...

¡Manda carallo!

Amio Cajander dijo...

ya te digo yo si manda.. y manda mucho